30 octubre 2008

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Rincón Taurino (30/X/08)

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"El LEON DE LEON"

Por Antonio Casanueva

Ahora que están desmantelando El Toreo de 4 Caminos, como respuesta al mas absoluto de los abandonos en que se encontraba tan histórico coso, poseedor de la tradición de la Fiesta Brava en la capital, desde su inauguración en 1907, Rincón Taurino no ha encontrado otro refugio que recordar algunos acontecimientos y efemérides de ese coso.

En este 15 de octubre se cumplieron 29 años de la desaparición física del llamado "León de León" Antonio Velazquez, producto de un terrible accidente, que nada tuvo que ver con su arriesgada profesión o el llamado “encimismo" de su estilo de torear sino por el contrario, su trágica muerte fue debida a las heridas causadas al caer de una elevada Azotea.

Antonio Velazquez nacido en León, Gto, el 14 de diciembre de 1920, fue inicialmente como hace muchos años se acostumbraba, peón de brega participando en varias e importantes cuadrillas, en especial la de Luis Castro "El Soldado", convirtiéndose posteriormente, en novillero llegando a tomar la alternativa en "El Toreo ", en su ubicación original de la Colonia Condesa de manos de Fermín Espinosa "Armillita Chico" quien le cedió al toro "Andaluz" de Pastejé siendo el testigo Silverio Pérez, precisamente en aquella inolvidable tarde del 31 de enero de 1943 cuando tanto padrino como testigo, realizaron las mejores faenas de sus respectivas vidas a "Clarinero" y "Tanguito" también de Pastejé en la tarde del debut de esta vacada.

Mas adelante y gracias a su valor a toda prueba y que le provocara graves cornadas, fue colocándose poco a poco en lugares importantes del escalafón taurino, descollando finalmente la noche del 28 de febrero de 1945 cuando luego de realizar una temeraria faena al bravo y fuerte toro de nombre "Cortesano" de la ganadería de Torreón de Cañas, convirtiéndose en el triunfador de aquella corrida y ganando el trofeo de "LA OREJA DE ORO" que estaba en disputa.

Seguido de ese gran triunfo, Velázquez viajó a España en donde confirmó la alternativa en Madrid el 4 de octubre de ese mismo año, de manos de "El Albaicín" siendo el testigo de la ceremonia Pepín Martín Vázquez con el toro Charro, de nombre "Fuentecillo". Poco toreó Velázquez en España durante ese viaje, pero su carácter y valor indómito lo hicieron regresar en varias ocasiones durante la década de los años cincuenta llegando a completar cincuenta actuaciones en ese país.

De sus actuaciones en El Toreo de 4 Caminos, hoy tristemente en proceso de demolición, entre otras mas afortunadas, destaca aquella del 30 de marzo de 1958 en que alternando con Humberto Moro y José Ramón Tirado, el cuarto de la tarde de nombre "Escultor" de la ganadería de Zacatepec, el que al decir de don Heriberto Lafranchi; "era un toro con mucho poder y temperamento que por no haber sido convenientemente castigado, llegó al tercio final tirando tremendos derrotes". Antonio Velazquez lo toreó bien de capa especialmente por temerarias Gaoneras, que eran su especialidad.

Durante el tercio final, no pudo acomodarse completamente con la muleta y al intentar un pase natural, fue cogido por "Escultor" quien que le propinó la mas espantosa cornada que se haya visto, en la que el pitón le penetró por el lado derecho del cuello, perforándole la lengua, destrozando la cavidad palatina y fracturando tanto el maxilar inferior como la base del cráneo, dejando graves lesiones y alejándolo de la profesión por largo tiempo, mientras duró su larga y penosa recuperación.

En estos días, al pasar por el Periférico y contemplar con tristeza El Toreo de Cuatro Caminos, no solo por su abandono y olvido sino también por su avanzado grado de desmantelamiento, no he podido menos que recordar, como si las estuviera viendo nuevamente las trágicas escenas de "Escultor" de Zacatepec levantando por los aires a Velázquez y lanzarlo en contra del estribo, al tiempo que le introducía el pitón por el cuello.

Antonio Casanueva