- por Oscar MEJÍA
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| foto Sainos |
La codicia, el ansia de
riqueza es característica de los que navegan cual bucaneros por los mares de la
política, ávidos de enriquecerse mientras ocupan un puesto
público aprovechan, mientras les dura, la facultad que los ciudadanos les conferimos
para hacer ejecutar y respetar las leyes; quebrantando éste mandato usan sin
limitaciones el poder que se les otorga, tomando por asalto a la sociedad y sus
bienes como botín de su insaciable afán de filibusteros. Los funcionarios del
gobierno del estado de Puebla no han sido ni son la excepción, más bien son
muestra de ello. Por lo que a la fiesta brava concierne nos consta.
Joya del taurinismo
poblano fue por años la plaza de toros El Relicario, reconocida y respetada en
el medio de los toros en nuestro país y más allá de sus fronteras como modelo
de operación de esta actividad tan llena de valores, hasta que las
circunstancias la pusieron en manos de sinvergüenzas.
Fue Marín, gobernador de
triste recuerdo para nuestra entidad y repudio nacional, el que a la gacha
despojó a su legítimo e indiscutible padre, quien cumplía ampliamente con la obligación
de conservarla sana y floreciente, de su derecho de usufructo y a la afición
del privilegio de deleitarse, poniendo a la bella doncella en manos de aventureros
y padrotes sin escrúpulos. Pepe Huerta la convirtió taurinamente en fraude y en
la práctica en cantina; el hermano Juan siguió con el manoseo, diciéndose el
empresario sin serlo hizo un desmadre y por poco termina en desgracia de graves
consecuencias su surrealista gestión.
Y al abordaje mis
corsarios!, puesta en la orfandad la plaza, empezaron
a aparecer los vivos como en los viejos tiempos: Creyendo que dándole coba a los poblanos, prometiendo de las
once mil vírgenes las perlas, haciendo cálculos alegres supongo sin tomar en
cuenta la leche amarga de los funcionarios a cargo, aprovechando los días de la
feria de mayo Alejandro Martínez Vértiz presentó tres cartelitos sin pies ni
cabeza, así le habrá ido que las promesas de amor terminaron en graciosa huida,
¿pero que creen? nos dejó abandonada la cola y hoy hace su aparición otra empresa que ostenta el nombre de ”Empresa
de la plaza de toros El Relicario” con Manuel Cataño como gerente quien
aprendió el caminito poblano haciéndola de gestor del propio Martínez Vértiz, que si
hubo pérdidas no fueron suyas claro está. Ahora resulta asesorando a hombres
que hasta ahorita yo considero decentes y serios, los ganaderos Roberto Viezcas
y Diego Argüelles.
En rueda de prensa este
grupo anuncia cartel de lujo, con El Juli, sin duda gran figura en pleno periplo
americanista, ya saben haciendo la América, con Fernando Ochoa en despedida ¿que a quién le importa? y El Payo de todos mis respetos; hasta ahí pues está bien.
Pero… como en los ranchos
aparece en el cartel 6de diversas ganaderías6, ofrecen de chile de dulce y
manteca mencionando marcas de hierros de prestigio, Xajay, Fernando de La Mora
etc, nomás que de trompa pá fuera no en el cartel “oficial”; y pregunto: ¿quién chingaos en el
ayuntamiento autorizó este evento en el que pretenden cobrar $1,300.00 pesotes
por boleto de barrera sin exigir la garantía, principalísima ésta, de la
procedencia de la materia prima? Se botan la puntada de ofrecer que los toros
estarán la semana próxima en los corrales. Semana que empieza el lunes 4 y el festejo se anuncia el
16, ¿12 días en los corrales? ¿a quién se le ocurre?, esto no es serio, veremos
si lo cumplen y ¿ya se revisó bien las condiciones del inmueble? y..bueno pues.
Por otro lado, estaría bien
que explicaran ¿qué es lo que les da derecho a ostentarse como la “EMPRESA DE
LA PLAZA DE TOROS EL RELICARIO”? ¿están legalmente constituidos como tal?, ¿qué trámite cumplieron?, ¿cuándo participaron
en concurso o licitación como marca la ley?, ¿dónde está el oficio avalado por
la autoridad que los autoriza, en qué condiciones? o qué, ¿es otra tomada de
pelo a ver si los poblanos se la tragan? o una de esas negociaciones en lo obscurito tan de moda en la clase política a espaldas de los ciudadanos. (Piratería: Falsificación de un producto comercial)
Muchas preguntas, ¿no cree usté?
…remato EN LOS MEDIOS
