CRÓNICA DE ESTO.
Los hermanos Álvarez Bilbao, triunfadores de la tarde. Foto: Juan Ramos/ESTO
28 de enero de 2008
Barralva se llevó la tarde Pitito, indultado
Los hermanos Álvarez Bilbao, a hombros
Miguel Ángel García
No siempre los matadores se llevan la victoria y no siempre el público está con ellos. Sucedió ayer en la Plaza México; en esta ocasión los toros de Barralva han sido los protagonistas de la tarde, los que se llevaron las palmas, las ovaciones y la entrega del respetable. Y, por si fuera poco, Pitito, número 181, con 482 kg., fue indultado prácticamente por el público, el cual quedó maravillado con la bravura y calidad del precioso ejemplar. Al final, los ganaderos Álvarez Bilbao fueron sacados a hombros de la gran plaza, como máximos triunfadores de la decimotercera corrida de la temporada grande.
PITITO
Lidiado en cuarto lugar, Pitito enamoró los tendidos. No sólo por su bella estampa y carácter brioso, sino además por su maravillosa calidad para humillar. De notable musculatura, Pitito acudió con celo al peto del caballo, peleó de firme, yendo alegremente a la vara y empujando con los cuartos traseros, desde ahí ya se había echado al público en la bolsa y la muestra fueron los aplausos que recibió por su excelente comportamiento ante el piquero, Aspeitia, quien también fue aplaudido por soberbio puyazo. Una vez que Pitito se enfrentó a la muleta de su lidiador, no tuvo más que muestras de calidad y bravura, levantando las pasiones del que paga el boleto; deleitó con sus extraordinarias cualidades, parecía quererse comer la muleta, iba y regresaba a la tela roja con codicia y metiendo la cabeza con una condición admirable, tanta, que terminó por quitarle el mérito a su socio -torero- pues aunque no estuvo mal y fue coreado con fuerza, no logró romper por completo su labor, siendo que Pitito le ofrecía la consagración. El público comenzó a sacar los pañuelos blancos y a gritar, ¡toro, toro! Incesantemente, hasta que el juez de plaza decidió que no fuera estoqueado. Pitito fue regresado a los corrales, ganándose un sitio importante en la dehesa donde nació, pues desde hoy será uno de los sementales predilectos de los criadores de bravo, Álvarez Bilbao. Al final, los dos ganaderos fueron sacados a hombros de la Plaza México, bajo las ovaciones del público.
PRESENCIA Y EDAD
Sus nombres, por orden de lidia: Caratuerto, Madrilisto, Farorero, Pitito, Cardisito y Vencinoso. Todos impecablemente presentados, de pitón a rabo. A excepción del quinto, flojo para el castigo, el resto llegó con fuerza y bravura al peto y hubo fuertes tumbos.
ANTONIO BRICIO
Siempre en la cara del toro, poniéndole empeño a su labor, sin embargo, en su primero no transmitió como se esperaba y alargó innecesariamente su labor hasta que aburrió al respetable, el cual le fue indiferente al final; queda como recuerdo el escalofriante péndulo con que inició su trasteo. En su segundo, el del indulto, Bricio tuvo la oportunidad de salir como héroe, sin embargo su labor fue entre altibajos y no logró romper al máximo. Tampoco podemos decir que estuvo mal, ya que para el poco rodaje que ha tenido, mucho se debe de admirar lo que hizo durante la tarde. Lástima que el público no lo vio así, pues, cosa extraña, dio todo el crédito al toro.
ISRAEL TÉLLEZ
Mostró mejor técnica, más depurado e incluso se vio por encima de su primer toro. Téllez toreó muy a la mexicana y extrajo pases de mucho mérito. Tal vez tenía ganada una oreja, sin embargo la dejó escapar por fallar a la hora de matar y hasta escuchó un aviso. Con su segundo toro, bien con los palos y con la franela estuvo machacón ante un toro complicado. Nuevamente mal con la espada y escuchó otro aviso.
JAVIER VALVERDE
Confirmó su alternativa con el toro Caratuerto, número 178, con 458 kg. Ha mostrado sitio y técnica, aunque en su primero estuvo un tanto rapidillo en sus muletazos. No obstante tuvo momentos brillantes, como los tres circurrets que cuajó; mal con la espada y división de opiniones en el tercio. En su segundo todo quedó en voluntad y ganas de agradar.
CRISTIAN SÁNCHEZ
Por segunda ocasión consecutiva, el banderillero Cristián Sánchez se lució en el tercio de las banderillas. El rehiletero nuevamente fue llamado al tercio del ruedo para escuchar los aplausos del respetable, gracias a dos fenomenales pares de banderillas que ejecutó en el cuarto toro. Cristian nuevamente se convierte en el banderillero de la semana.
No siempre los matadores se llevan la victoria y no siempre el público está con ellos. Sucedió ayer en la Plaza México; en esta ocasión los toros de Barralva han sido los protagonistas de la tarde, los que se llevaron las palmas, las ovaciones y la entrega del respetable. Y, por si fuera poco, Pitito, número 181, con 482 kg., fue indultado prácticamente por el público, el cual quedó maravillado con la bravura y calidad del precioso ejemplar. Al final, los ganaderos Álvarez Bilbao fueron sacados a hombros de la gran plaza, como máximos triunfadores de la decimotercera corrida de la temporada grande.
PITITO
Lidiado en cuarto lugar, Pitito enamoró los tendidos. No sólo por su bella estampa y carácter brioso, sino además por su maravillosa calidad para humillar. De notable musculatura, Pitito acudió con celo al peto del caballo, peleó de firme, yendo alegremente a la vara y empujando con los cuartos traseros, desde ahí ya se había echado al público en la bolsa y la muestra fueron los aplausos que recibió por su excelente comportamiento ante el piquero, Aspeitia, quien también fue aplaudido por soberbio puyazo. Una vez que Pitito se enfrentó a la muleta de su lidiador, no tuvo más que muestras de calidad y bravura, levantando las pasiones del que paga el boleto; deleitó con sus extraordinarias cualidades, parecía quererse comer la muleta, iba y regresaba a la tela roja con codicia y metiendo la cabeza con una condición admirable, tanta, que terminó por quitarle el mérito a su socio -torero- pues aunque no estuvo mal y fue coreado con fuerza, no logró romper por completo su labor, siendo que Pitito le ofrecía la consagración. El público comenzó a sacar los pañuelos blancos y a gritar, ¡toro, toro! Incesantemente, hasta que el juez de plaza decidió que no fuera estoqueado. Pitito fue regresado a los corrales, ganándose un sitio importante en la dehesa donde nació, pues desde hoy será uno de los sementales predilectos de los criadores de bravo, Álvarez Bilbao. Al final, los dos ganaderos fueron sacados a hombros de la Plaza México, bajo las ovaciones del público.
PRESENCIA Y EDAD
Sus nombres, por orden de lidia: Caratuerto, Madrilisto, Farorero, Pitito, Cardisito y Vencinoso. Todos impecablemente presentados, de pitón a rabo. A excepción del quinto, flojo para el castigo, el resto llegó con fuerza y bravura al peto y hubo fuertes tumbos.
ANTONIO BRICIO
Siempre en la cara del toro, poniéndole empeño a su labor, sin embargo, en su primero no transmitió como se esperaba y alargó innecesariamente su labor hasta que aburrió al respetable, el cual le fue indiferente al final; queda como recuerdo el escalofriante péndulo con que inició su trasteo. En su segundo, el del indulto, Bricio tuvo la oportunidad de salir como héroe, sin embargo su labor fue entre altibajos y no logró romper al máximo. Tampoco podemos decir que estuvo mal, ya que para el poco rodaje que ha tenido, mucho se debe de admirar lo que hizo durante la tarde. Lástima que el público no lo vio así, pues, cosa extraña, dio todo el crédito al toro.
ISRAEL TÉLLEZ
Mostró mejor técnica, más depurado e incluso se vio por encima de su primer toro. Téllez toreó muy a la mexicana y extrajo pases de mucho mérito. Tal vez tenía ganada una oreja, sin embargo la dejó escapar por fallar a la hora de matar y hasta escuchó un aviso. Con su segundo toro, bien con los palos y con la franela estuvo machacón ante un toro complicado. Nuevamente mal con la espada y escuchó otro aviso.
JAVIER VALVERDE
Confirmó su alternativa con el toro Caratuerto, número 178, con 458 kg. Ha mostrado sitio y técnica, aunque en su primero estuvo un tanto rapidillo en sus muletazos. No obstante tuvo momentos brillantes, como los tres circurrets que cuajó; mal con la espada y división de opiniones en el tercio. En su segundo todo quedó en voluntad y ganas de agradar.
CRISTIAN SÁNCHEZ
Por segunda ocasión consecutiva, el banderillero Cristián Sánchez se lució en el tercio de las banderillas. El rehiletero nuevamente fue llamado al tercio del ruedo para escuchar los aplausos del respetable, gracias a dos fenomenales pares de banderillas que ejecutó en el cuarto toro. Cristian nuevamente se convierte en el banderillero de la semana.
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