"LAS DESPEDIDAS"
JORGE "El Ranchero" Aguilar
Por Antonio Casanueva
En este número, iniciamos una serie mas, ahora con el tema de "Las Despedidas", en el que pretendemos, hablar de aquellos retiros famosos o si me permite decirlo las ceremonias de DESPEDIDA de los toreros mas famosos con que ha contado la torería mexicana y que optaron por retirarse de los ruedos en La Plaza México, la que a 63 años de vida cuenta con un largo historial tanto en ese como en otros muchos temas.
Jorge Aguilar, nació del 29 de abril de 1927 en pleno campo bravo tlaxcalteca, en la ganadería de Piedras Negras, habiendo sido hijo del banderillero Gabriel Aguilar Camaño, quien posteriormente fuera colaborador de la ganadería propiedad de Don José María González.
Jorge, vistió por primera vez el traje de luces en el año de 1945 en Tehuacan, Pue y dos años mas tarde, el 1o.de junio de 1947, debutó en la Plaza México matando al novillo "Lucero" de La Laguna y cortándole dos orejas al sexto, "Mordelón" en tarde que actuaba con Nacho Pérez, hermano de Silverio y con el infortunado torero leonés José Rodríguez "Joselillo".
En esa temporada inicial tuvo éxitos relevantes, actuando en 8 ocasiones. Recibió la alternativa en la plaza de Tlaxcala el 13 de marzo de 1949 de manos del portugués Diamantino Viseu a la que renunció al año siguiente para actuar nuevamente como novillero. Reapareció en la Plaza México en 1950 con éxitos relevantes, entre ellos, cortó tres rabos a los novillos: "Pistachero", "Tragaldabas" y "Raspinegro" de La Laguna en una temporada en que entre otros hizo pareja con Lalo Vargas, se recuerdan especialmente las confrontaciones entre ambos, éxitos que le permitieron tomar nuevamente la alternativa en La Plaza México durante la primera corrida de la siguiente temporada, el 28 de enero de 1951 de manos de otro torero lusitano Manolo Dos Santos quien le cedió al toro "Cartonero" de La Laguna siendo Chucho Córdoba el testigo.
Durante los años de 1952 y 53 fue a España alcanzando a torear unas 50 corridas, recibió varias cornadas, algunas de gravedad y confirmó la alternativa en Madrid de manos de Manuel Navarro siendo los testigos Luis briones y Jaime Malaver el 13 de Julio de 1952 con el toro "Caramelo" de Aleas.
A su regreso a México en la primera corrida de la temporada 1952-53, tarde que se recuerda especialmente por la faena de Manuel Capetillo a "Fistol" en la que ambos toreros alternaron con el español Manolo González, El Ranchero tuvo una magnífica tarde cortando oreja al tercero "Dinamito" y dos mas al sexto "Fundador" ambos de Zotoluca como todos los lidiados en esa tarde. Al domingo siguiente "El Ranchero" se consagró definitivamente ante la afición capitalina cortando las dos orejas y el rabo al toro "Montero" de San Mateo, que a la postre recibió los honores de arrastre lento en tarde memorable que se ponía fin a las diferencias de llamado -Pacto de San Martín-. En general aquella fue su temporada de consagración, además de ser quien mas toreó; completando seis actuaciones cortado nueve orejas y un rabo y recibiendo también grave cornada al intentar un novedoso quite.
Durante la temporada 55-56, en la inolvidable corrida del décimo aniversario de la inauguración de la plaza, El Ranchero realizó lo que por años fue considerada la mejor faena de este torero, si no a lo largo de su carrera al menos si en la capital de la república, al toro "Viajero" de La Laguna al que le cortó las orejas y el rabo dando vueltas al ruedo y siendo paseado a hombros en compañía del ganadero don Romárico González y de Joselito Huerta quien también obtuvo los máximos trofeos en esa memorable ocasión.
Muchos mas fueron los éxitos de Jorge Aguilar a lo largo de toda la republica pero muy especialmente en la capital, en donde tanto en la monumental México como en el El Toreo de Cuatro Caminos, hoy totalmente desmantelado, año con año realizó grandes faenas tanto de novillero como en la madures de matador de alternativa.
Finalmente en la temporada 1967-68, el once de febrero se de
spidió de la afición alternando nuevamente con Joselito Huerta y Chucho Solórzano hijo, realizando su última gran faena al toro "Forjador" de Mimiahuapan al que pese haber fallado con la espada le cortó dos orejas y luego de innumerables vueltas al ruedo, sus dos hijos ataviados con el traje de charro le desprendieron el añadido, no volviendo a vestir el terno de luces .
Jorge Aguilar tal y como seguramente lo habrán deseado desde las grandes figuras del toreo hasta los simples novilleros, murió haciendo lo que mas amaba, toreando en la placita de tienta de la ganadería de Coaxamaluca el 27 de enero de 1981 a la edad de 54 años de edad y 30 de haber tomado la alternativa.
Para terminar este relato, quisiera transcribir un extracto de la crónica que me enviara para el efecto el conocido ganadero, ex-torero y gran aficionado de siempre Carlos Pavón, de la tarde el 16 de febrero de 1958, en que "EL Ranchero" inmortalizó a "Bogoteño" de La Laguna en el ruedo de la hoy desaparecida Plaza de toros “El Toreo” de Cuatro Caminos.
Jorge Aguilar alternó aquella tarde con Juanito Silveti quien había cortado dos orejas a “Rebolero” y Heriberto García hijo que tomara la alternativa con una bella corrida de La Laguna....
"Al quinto salió Bogoteño, repitiendo muy en corto al doblar con el capote, "El Ranchero" se limitó a lancear sin mayor lucimiento pero cumpliendo, a pesar de ello, un grupo de sol se metió con el torero y la bronca arreció cuando un espontáneo se tiró al ruedo y que Pinocho, peón y apoderado del diestro pepenó al espontáneo y lo entregó a los guardias en el callejón…...Bronca.
"Jorge había observado la calidad del toro y brindando a un aficionado dentro de absoluto silencio caminó parsimonioso a los medios. Silencio absoluto. El toro permaneciendo en las tablas, Jorge se despatarraba y adelantaba la muleta en la mano izquierda totalmente adelantada al toro. ... Se arranca Bogoteño , lo prende Jorge, con un temple, con una profundidad y un sentimiento que había sido troncado de coraje al mas bello de todos; amor, amor propio, amor al hecho de ser torero, amor al arte y también amor al toro que colaboraría con el para confeccionar una de las faenas mas sentidas y bellas que llegué a veri en mi vida".
"Fueron siete naturales ligados rematados con un kilométrico pase de pecho que terminó enroscado y salió por su hombro derecho impecablemente ....Mientras llovían sombreros, abrigos, puros y toda clase de prendas en un ruedo bordado de por el arte, mientras el manicomio campeaba en los tendidos.... Así fueron seis tandas consecutivas, todas por el lado izquierdo".
"Después de dos monumentales Rancheras, ahora llamadas dosantinas, otras tandas por la derecha y se llegó la hora de matar, se lleva El Ranchero al toro con medios pases de los medios donde se realizó toda la faena hacia las tablas". ¡Mátalo recibiendo! le grita el ganadero. Jorge no lo escucha y mata al segundo viaje pero eso no quita que la petición de rabo sea unánime. El juez lo concede y da la segunda vuelta al ruedo en compañía del ganadero, de ahí en hombros hasta Televisa"
Hasta aquí, este fragmento de la sentida y emocionada crónica de Carlos Pavón, que no podía ni debía quedarse guardada en el archivo y que hoy publicamos en este espacio en recuerdo y homenaje del desaparecido diestro tlaxcalteca
Antonio Casanueva
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