El Pana no dejó ir el rabo
Por: Álvaro Sánchez
Foto: Karim González
La corrida celebrada esta tarde en
El Zapata demostrando que se mantiene en un sitio importante, por la regularidad de sus actuaciones, centró la atención después que su primer toro saltó sobre el burladero de matadores; al destrabarse lo toreó de capa con ritmo en verónicas y garbosas gaoneras.
Banderilleó de menos a más y dos comprometidos muletazos cambiados por la espalda prologaron su labor que tuvo largueza y colocación. Menguadas las energías del toro, Uriel se volcó con la espada que aunque desprendida bastó, consiguiendo sus primeras dos orejas.
En séptimo lugar lidió uno de Vaca Hermanos, zancudo que se desplazaba bien por pitón derecho; aunque poco lució con el percal, clavó los rehiletes con facilidad, y con un Imposible en tablas, prendió el entusiasmo componiendo una faena en la que el toro se le empezó a quedar; terminó toreándolo con conocimiento por la cara, culminando lo anterior con otra soberbia estocada, para llevarse dos orejas más.
Sabemos que cuando torea El Pana todo puede suceder; recibió al quinto con una tafallera en tablas, luego el personal quite de la rielera, y el público le pidió banderillas, de las que sobresalió el tercer par. Se acomodó con la mano derecha teniendo eco a pesar de algunos desarmes. Se sintió que lo iba a matar y así fue logró una estocada recibiendo de magnífica colocación que mató de inmediato.
El juez ordena le entreguen dos orejas, pero el público insiste en el rabo que el mismo torero señala; al no acceder la autoridad El Pana se tiró en el piso sujetándose del rabo del toro para ser arrastrado junto con él; la tardanza para sacar al toro, hizo crecer el grito de ¡rabo, rabo! que Rodolfo por su propia mano cortó y paseó con las orejas.
Esto se dio porque el encargado de los caballos frisones, que hacían las veces de tiro de arrastre, desenganchó al ejemplar y permitió que el puntillero le entregara la puntilla al Pana, que con su propio mano cortó el rabo del ejemplar.
Cuando daba la vuelta le tiraron una bota de vino, y en los medios hizo que tomaría de ella, pero el público con insistencia le pidió que no lo hiciera y la dejó, muestra de que mucha gente todavía quiere seguirlo viendo.
Dos veletas fueron su saludo al primero, seguidas de verónicas cargando la suerte; dejó que la cuadrilla cubriera el segundo tercio, reservándose para realizar un buen trasteo por ambos lados con el sello del apizaquense que pinchó y se retiró entre palmas.
José Luis Angelino salió con grandes deseos de triunfo desde que recibió a su primero en los medios con chicuelinas y al quitar saltilleras citando de largo; banderilleó con voluntad poniéndose cerca al muletear, quedándosele uno de los rehiletes en la casaquilla; consiguió dos apéndices al cobrar una estocada bien colocada.
Con poco recorrido fue el cierraplaza, pero Angelino alcanzó momentos buenos con el capote y se superó al banderillear por dentro; brindó a los alternantes su machacona labor rematada de estocada delantera y caída; se ordena una oreja y ante regular insistencia la otra.
El primero en tocar pelo esta tarde fue Rafael Ortega en el que hizo segundo; regular desempeño tuvo con capa y banderillas, el toro acusó cierta debilidad lo que no impidió al torero engarzar templados muletazos, sobresaliendo los naturales. Bastó un espadazo delantero y caído para cortar las primeras peludas del festejo.
Cuando lidiaba al sexto molestaron algunas ráfagas de viento, que aunadas al poco desplazamiento del animal, únicamente dejaron ver la solvencia de Rafael que pinchó y se retiró entre algunas palmas.
El juez de plaza, Alberto Vázquez, multó a la empresa con 10,000 pesos por el acto del encargado del tiro de arrastre; determinó el veto de un año y medio al puntillero Gustavo Flores por desacato a la autoridad, y sugirió un veto de temporal (año y medio) o definitivo para El Pana por el acto cometido. Será decisión del cabildo la sanción que se hará acreedor.
Ficha
Corrida de Feria en tarde calurosa; ante dos tercios de entrada se lidiaron siete toros de El Grullo y uno de Vaca Hermanos (corrido en 7o. lugar), bien presentados que dieron buen juego en líneas generales; pesos 470, 480, 480, 520, 504, 470, 465, y 436 kilos. Rodolfo Rodríguez "El Pana" (mandarina y plata): Palmas y dos orejas. Rafael Ortega (blanco y oro): Dos orejas y palmas. Uriel Moreno "El Zapata" (sangre de toro y oro): Dos orejas y dos orejas. José Luis Angelino (rosa y oro): Dos orejas y dos orejas.El Zapata fue premiado con
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