Articulo de opinión de Fernando Lahoz.
AGOSTO - 24 - 2010
Gracias a extraordinarios amigos, tuve en mis manos los videos de las dos novilladas; cinco horas viendo toros, tres de un pachangón en el gran embudo y dos de seriedad, de un festejo como deben ser, realizado en Guadalajara.
Pero empecemos por el “cachondeo”, en el supuesto coso más importante de nuestro país.
Un cartel de “tuti.fruti”, sin cuadratura, sin argumento alguno, con un rejoneador sin mucho cartel, un frances con posibilidades, una dama que no ha dado el ancho y un niño, que ya no sabemos si es becerrista, novillero o que.
Pero este “simpático” cartel no ha sido todo el show en la “ex-gloriosa Plaza México”.
Han salido por la puerta de toriles ocho astados indignos de un coso de esa magnitud, sin trapío, sin remate, “chotos” infames, presentables para cualquier festival de pueblo.
La reseña del festejo se puede hacer en pocas palabras.
El francés quedo igual, Lupita no pudo y el niño, con los dos más chicos, tampoco dió la nota.
Quiero aclarar que con Michelito no tengo ningún problema, el menos culpable es el chaval, tiene afición y se pone, pero por Dios, la gente que tiene atrás, deja mucho que desear.
Y ahora si hablemos de lo serio.
En la plaza de Guadalajara, se lidió una novillada muy seria y cuajada de Santa Fé del Campo, encierro que sin problemas pasaba como corrida de toros en cualquier plaza, incluyendo la derruida México.
Partieron plaza Fernando Labastida, que está metido en un hoyo, Oliver Godoy, que tuvo a sus paisanos en contra y Gerardo Adame, que demostró, una vez más, que camina a pasos agigantados hacia la alternativa.
La novillada tuvo bravura, algunos astados hasta con genio, pero esas embestidas aunadas a la extraordinaria presencia, daban emoción, se sentia el peligro.
Labastida pasó de puntitas, a Godoy la gente le trató con dureza, haciendo cierto el dicho que “nadie es profeta en su tierra” y Adame ha bordado el toreo.
Pero más allá del resultado de los actuantes, el fondo de las cosas es que la Plaza México se ha convertido en una pantomima de lo que deben ser los festejos en lo que se supone, es el coso máximo en la República Mexicana.
Carteles con desconocidos y principiantes, con entradas paupérrimas, con novillos impresentables, total un desastre.
Y los novilleros punteros, las novilladas excelentemente presentadas y dónde los triunfos realmente valen.. en Guadalajara.
La capital de Jalisco, se ha convertido en la plaza de más seriedad en la república mexicana y en una de las más importantes a nivel mundial.
Urge un cambio radical en el gran embudo mexicano.
Es necesario darle la seriedad y el prestigio que siempre ha tenido la mole de cemento.
La México se ha convertido en un ruedo sin importancia, Guadalajara en la seriedad.
Esperemos que dentro de quince dias no anuncien en La México, un mano a mano del bombero torero y de los enanitos de Torreón, aunque a este paso, no lo dudaria ni un instante.
Los 380 kgs. de La México(imagen izquierda) y el mismo peso en Guadalajara, pequeña gran diferencia de básculas y de trapio.
Fernando Lahoz
Fotografias cortesia de www.opinionytoros.com y www.toroestoro.com
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