Humberto Flores fue empitonado sin ser lesionado. Foto: Carlos Ochoa/ESTO
6 de febrero de 2008
Torearon bien, pero mataron mal
Faenas que no tuvieron un final feliz
Horacio Soto Castro
Hubo muchos presentes elegantemente adornados para entregárselos a la Plaza México en su 62 aniversario, pero no les alcanzaron a quitar los listones y no se pudieron ver (suponemos que eran orejas) lo que le iban a regalar los alternantes, quienes iban muy orgullosos para quedar bien con la festejada, que se vio rebosante de invitados, con mucho entusiasmo para hacerla feliz un año más.
Taurinamente, los matadores cuajaron bellas e intensas faenas que hicieron explotar de alegría a los concurrentes, quienes sufrieron varios desencantos porque los diestros sacaron las espadas con la punta roma, se dieron a pinchar, perdiendo trofeos y en este cierre de temporada no hubo corte de orejas.
Las expectativas que había en torno al festejo se cubrieron a medias.
Los astados de Xajay y de Los Encinos dieron un juego desigual, impropios para el lucimiento, y los toreros estuvieron por encima de ellos.
Cada quien en su particular forma de interpretar el toreo.
FLORES
Los deseos de Humberto Flores se estrellaron frente a su primero de Xajay, que fue manso, descastado y se fue a refugiar en tablas. Y sobre ello, el viento estuvo en todo su apogeo. Se lució con el capote en verónicas y en quite por chicuelinas muy ajustadas. Faena sin gran relieve sobre ambas manos y pinchó para retirarse en silencio y pitos al toro. En su segundo, de Los Encinos, caminó más. Realizó bonitas verónicas y con la muleta otra faena derechista con pases largos y templados. Le intentó por la izquierda y fue prendido en el muslo derecho, cara interna, pero solamente le rasgó la taleguilla. Volvió por la derecha y prácticamente realizó un pase combinado de ayudado, forzado de pecho, el de pecho, molinete y desplante que le corearon fuerte. Mal a la hora de matar y saludó en el tercio.
JOSÉ TOMÁS
El diestro de Galapagar, con el de Los Encinos, se dejó ver en el quite por gaoneras y sumó hasta cinco, muy ajustadas, no del todo aseadas para escuchar fuertes olés. José Tomás toreó por alto y la res empezó a quedarse corta o tirando el derrote para sufrir varios enganchones. José Tomás estuvo valiente y aguantó las medias arrancadas. Mató de gran estocada y por ello hubo fuerte petición de oreja que no se concedió. Pitos al toro y salida al tercio del madrileño, que cuando iba a dar la vuelta lo echaron para atrás. Con el de Xajay, el de Galapagar se impuso e hizo vibrar al público con una serie de chicuelinas ceñidas y rematar con revolera. Con la muleta, estatuarios sin moverse, ayudados templados, naturales no muy limpios. Faena variada que enloqueció a la clientela. Terminó con manoletinas también más firme que un soldado. Pinchó antes de la estocada defectuosa y recibió una ovación sostenida en el tercio y pitos al toro.
IGNACIO GARIBAY
Ignacio Garibay pechó con el lote impropio; el primero de Los Encinos, al que veroniqueó y le recetó bonitas y ajustadas chicuelinas. El toro se quedó corto y sólo alcanzaba a dar medios pases, de magnífica exposición, exponiendo y muy empeñoso. Estocada a un tiempo y pitos al toro y él saludó en el tercio. Con el de Xajay, el más chico del encierro, volvió a esforzarse, pero sin obtener resultado positivo, aunque él dejó clara su capacidad torera. Pinchó y escuchó un aviso.
SUBALTERNOS
El veterano picador Efrén Acosta Baray se despidió de la profesión y dio la vuelta con sus compañeros, entre aplausos y "Las golondrinas".
Nuevamente Christian Sánchez saludó en el tercio por sendos pares de banderillas, y Raúl Bacelis también se desmonteró.
(Nota publicada en el ESTO...ver)
Taurinamente, los matadores cuajaron bellas e intensas faenas que hicieron explotar de alegría a los concurrentes, quienes sufrieron varios desencantos porque los diestros sacaron las espadas con la punta roma, se dieron a pinchar, perdiendo trofeos y en este cierre de temporada no hubo corte de orejas.
Las expectativas que había en torno al festejo se cubrieron a medias.
Los astados de Xajay y de Los Encinos dieron un juego desigual, impropios para el lucimiento, y los toreros estuvieron por encima de ellos.
Cada quien en su particular forma de interpretar el toreo.
FLORES
Los deseos de Humberto Flores se estrellaron frente a su primero de Xajay, que fue manso, descastado y se fue a refugiar en tablas. Y sobre ello, el viento estuvo en todo su apogeo. Se lució con el capote en verónicas y en quite por chicuelinas muy ajustadas. Faena sin gran relieve sobre ambas manos y pinchó para retirarse en silencio y pitos al toro. En su segundo, de Los Encinos, caminó más. Realizó bonitas verónicas y con la muleta otra faena derechista con pases largos y templados. Le intentó por la izquierda y fue prendido en el muslo derecho, cara interna, pero solamente le rasgó la taleguilla. Volvió por la derecha y prácticamente realizó un pase combinado de ayudado, forzado de pecho, el de pecho, molinete y desplante que le corearon fuerte. Mal a la hora de matar y saludó en el tercio.
JOSÉ TOMÁS
El diestro de Galapagar, con el de Los Encinos, se dejó ver en el quite por gaoneras y sumó hasta cinco, muy ajustadas, no del todo aseadas para escuchar fuertes olés. José Tomás toreó por alto y la res empezó a quedarse corta o tirando el derrote para sufrir varios enganchones. José Tomás estuvo valiente y aguantó las medias arrancadas. Mató de gran estocada y por ello hubo fuerte petición de oreja que no se concedió. Pitos al toro y salida al tercio del madrileño, que cuando iba a dar la vuelta lo echaron para atrás. Con el de Xajay, el de Galapagar se impuso e hizo vibrar al público con una serie de chicuelinas ceñidas y rematar con revolera. Con la muleta, estatuarios sin moverse, ayudados templados, naturales no muy limpios. Faena variada que enloqueció a la clientela. Terminó con manoletinas también más firme que un soldado. Pinchó antes de la estocada defectuosa y recibió una ovación sostenida en el tercio y pitos al toro.
IGNACIO GARIBAY
Ignacio Garibay pechó con el lote impropio; el primero de Los Encinos, al que veroniqueó y le recetó bonitas y ajustadas chicuelinas. El toro se quedó corto y sólo alcanzaba a dar medios pases, de magnífica exposición, exponiendo y muy empeñoso. Estocada a un tiempo y pitos al toro y él saludó en el tercio. Con el de Xajay, el más chico del encierro, volvió a esforzarse, pero sin obtener resultado positivo, aunque él dejó clara su capacidad torera. Pinchó y escuchó un aviso.
SUBALTERNOS
El veterano picador Efrén Acosta Baray se despidió de la profesión y dio la vuelta con sus compañeros, entre aplausos y "Las golondrinas".
Nuevamente Christian Sánchez saludó en el tercio por sendos pares de banderillas, y Raúl Bacelis también se desmonteró.
(Nota publicada en el ESTO...ver)
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