- por óscar MEJÍA
Conozco bastante bien la trayectoria taurina del poblano José Ricardo Vega Rodríguez “Pepín Vega”.
Partiendo de que su esfuerzo para llegar a torear en
Según sus palabras Pepín llegó a
( fotos de ese día en El Relicario: Pepín entre Pedro Villalpando, su primer maestro y mi menda. Y del “Pepín” actual en el túnel de
Durante ese tiempo, algo más de diez años dice haber toreado 30 festejos (no todos muy formales); con simple aritmética arroja un promedio de menos de 3 por año.
Pepín siempre ha mostrado gran empeño por sobresalir, con ángel natural se comunica pronto con la gente, valor suficiente para estar en la cara y disfrutarlo, un concepto artístico personal que necesita expresar. Y un papá que lo quiere mucho pero que no sabe de toros.
Que yo conozca, ha cambiado de mentor cuando menos cinco veces, puede que más. Lo que le ha impedido asimilar la técnica adecuada del oficio.
Esto en resumen quiere decir que las condiciones anímicas, técnicas del torero no le dan mayor garantía de éxito en un compromiso como el que enfrentó.
La pregunta es: ¿a quien se le ocurrió que en esas condiciones, ante tan pocas posibilidades de éxito, Pepín Vega podía salir bien librado y triunfador?
No hubo ninguna planeación seguramente. Y así hay muchos, al garete.
La otra: si para presentarse en La México un aspirante a matador de toros con razonables posibilidades es necesario foguearse y casi no se dan novilladas en nuestro pais. ¿como le pueden hacer los novilleros que no tienen dinero para pagar por torear para prepararse?
Por esta vez remato En Los Medios
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