...las charlas con EL BARDO DE LA TAURINA

EL BRILLANTE EN BRILLANTE

El domingo que recién se murió, paradójicamente cobro vida la presencia mas brillante de lo que va de la Temporada de La Plaza México y es que sin duda el hecho de que el Brillante haya conseguido colocar al “Gallero Majo” de Guillermo Capetillo en el cartel estelar del serial taurino capitalino, debe consignarse como un acto brillantísimo del Brillante, Alfredo Gómez y este hecho sin duda nos lleva a reflexionar hasta donde y en que grado influye en un torero, el estar apoderado, por un apoderado que es precisamente eso, un apoderado y para decirlo de corridito en esta temporadilla, varios aspirantes y algunos maduros, no han concretado su quehacer por falta de dirección, es decir de apoderamiento y el fin de semana algo quedo claro, que ya es hora de que se reconozca la labor de estos hombres y como no se si esto se logre, desde aquí rindo un publico reconocimiento a este Brillante, tan brillante, que en el sorteo dio muestras de lo que es mandar a la hora de empatar los lotes y mas a la hora de sortear y mucho mas a la hora de acomodarlos, lo que dio como resultado que le obsequiara a ese brillantísimo torero que lo es Guillermo Capetillo un toro sanmarqueño de nombre “Simiente” el cual si bien es cierto que era harto pegajoso, también es cierto que era un toro cortado para labrar una obra de muchos kilates y que para mi gusto el torero asolerado quien vistió con un terno zapote, es decir verde en la seda y negro en lo bordado, nos dejo ver varias facetas la primera es que siempre ha sido mas brillante que el modelo original del capetillismo y en segundo que con unas Verónicas aquí, otra Media allá, unos Trincherazos acullá y unos Derechazos por acá, fueron suficientes para que la Porra Libre le entregara el mas brillante reconocimiento al magnificar esa expresión de “Gracias Guillermo”, con la cual quedo designado como el torero mas brillante de este serial y claro que me doy cuenta que le falto mandar, redondear, parar, rematar, matar, desorejar, pero eso es para los toreros convencionales, no para este que es la Estrella de Belem, esa que brillara allá cada año bisiesto, para iluminar el albero de la fantasía.

LIBROS Y PINTURAS

En la ráfaga del tiempo esta lidiando una corrida mas de la temporada de su vida la maestra Gabriela García Padilla impulsora de la cofradía “Mujeres Taurinas Mexicanas” y para salir por la Puerta Grande, nos anuncia al alimón la entrada a las Librerías Gandhi del libro de su cosecha “Piedras Negras bravura con abolengo” lo que significa una manera de dar gusto al publico que se interesa por las lecturas que gozan de cartel, así que ya no habrá el pretexto de que el libro este ausente, porque hoy esta mas que presente para ser adquirido y a la par de esta noticia García Padilla nos hace saber que en este mes será exhibida la faena pictórica del artista Eduardo de la Peña, la que sin duda causará expectación pues se trata de una obra revolucionaria para el ambiente taurino, por lo que nos adelanta la publirelacionista que la muestra debutará en un horario previo a corrida de toros y se brindara por ella con caballitos de tequila, ni hablar el toro es innovación y por ello seguiremos en corto esta muestra que será anunciada en la pizarra como ¡Pinturería, Torería , Alegoría!

TORO NEGRO

Torero y actor, Fernando Casanova hijo de un Coronel Villista de quien hereda casta y sapiencia, ecuestre virtudes que suma a esa su percha bravía la que enfunda en seda y oro para anhelar torear de capa como el “Soldado” por la derecha como Silverio y por la zurda como Garza, mas como la pantalla de plata lo reclama Casanova decide dar nacensia al guión de su propia vida y llevarlo a las salas cinematográficas bajo el titulo de “Toro Negro” lo cual sucede hace cincuenta años y hoy vuelve a cobrar vigencia cuando ese gran taurino que lo es el Lic. Jorge Gonzáles Ortega en alternancia con Don Héctor Castillo, patriarca mayor de la afición y Elías Ruvalcaba, gitano chipén en un lance de sabor torero sentaron al ultimo gran divo, lo armaron con un buen trago y echaron a andar el cinematógrafo y al calor del afecto de los cabales Fernando Casanova, fue narrando de propia voz esa historia romántica en extinción, la de los torerillos de la legua y remato en todo lo alto al proclamar “La Fiesta requiere de toreros que la honren, ganaderos que la dignifiquen, empresarios que la valoren y aficionados que la amen”