LO QUE VI AYER POR TV EN LA 5ª CORRIDA

MI OPINIÓN 

• por Pedro Julio Jimenez Villaseñor 

5ª CORRIDA de la temporada grande en la plaza México. “El Zotoluco”, Miguel Ángel Perera y Octavio García, “El Payo” con 6 de Campo Real… Me gustó mas el primero toro que el segundo, me gustó más, sin comparación posible, el segundo espada sobre el primero. Decían los comentaristas que este burel no tenía transmisión, seria mas correcto mencionar que no tenia raza, un toro “rajado” no puede emocionarnos, esta lo puso de sobra Perera que se llevó dos correctos apéndices en este su primero de la tarde por faena lentísima y con varios muletazos en redondo. “El Payo” inició su faena de muleta permitiendo enganchones, consecuencia posterior a los derrotes de su enemigo y que termina el queretano por cambiar de tónica al pegarse un atrabancado arrimón sin darse cuenta que el de Campo Real había cambiado de lidia y tiraba a terminar embistiendo mejor que al inicio de su faena. Tiene que agradecerse esta actitud pero quizás si le hubiera dado más distancia a su faena otro gallo le hubiera cantado, un pinchazo, media con aviso al canto y colorín colorado, se acabó la primera parte de esta corrida.

CON EL cuarto de la tarde creo se precipitó el juez de plaza, Roberto Andrade, al regresarlo por un supuesto fallo en sus patas. Tanto en el callejón como en el tendido veíamos abrigos y chamarras por lo que me animo a creer de un posible calambre a causa de la humedad, la poca temperatura en los corrales que debe de ser menor en esos interiores y causante de estos casos. Sale el reserva, de la misma procedencia y de inmediato es chillado por su poca presencia, sin embargo avisa “El Zotoluco” un regalo y el complaciente asistente se acalla, pases de mero tramite, tres cuartos de espada que derrumban a un débil toro que lo que mas le notamos fue eso precisamente, la falta de fuerza.

EL LIDIADO en el supuesto lugar de honor, el quinto, para Perera, fue débil y descastado, soso, sin emotividad, terminando el intento de muletazo con la cara muy en alto, toro incomodo que se va al destazadero de una estocada completa y Perera se retira en silencio.

“EL PAYO”, con el que terminaría el festejo. Nada de capa y vislumbramos una faena de aliño solamente, manso de campeonato este ex habitante del campo queretano, paisano de su presunto matador que efectivamente no logra pegar un solo muletazo que valga la pena, mas si un susto al perderle la cara a su enemigo del que sale bien librado, anuncia uno de regalo y de estocada muy caída se acaba la corrida para dar paso a los de obsequio.

LA ENTRADA apenas llegará a más del cuarto del aforo, el coso se va vaciando poco a poco, se nota el desinterés, y frío de la ya noche, sale el primer obsequio, es de Javier Garfias, regulares lances de recibo, buen puyazo de Luís Miguel González, el secretario de los subalternos, a Eulalio le molesta el viento, cortas tandas por ambos lados que calan entre el ya escaso publico, estocada completa que hace doblar al de don Javier, petición de oreja que es concedida. 

      

FUERTE RECHAZO al conocer la gente que es de Campo Real el que cierra el festejo, este es el de regalo para Octavio García. De feo trote, corto de embestidas es este último que impide todo lucimiento al toreársele de capa, lo real de los de Campo Real es que en esa dehesa realmente impera la debilidad y la mansedumbre y si me lo permiten creo que se torea muy rápido, sin jalar a los bureles, sin ligar, dándoles y ofreciéndoles la oportunidad a los toros de no ahogarse y tratar de engañarlos ante tanta muestra de boyantia. A pesar de mi pobre opinión “El Payo” a finales de la faena logró calentar el ambiente en dos series de derechazos con adornos, dos pinchazos, un aviso, media caída que es suficiente y…  

LOS ESPADAS muy por encima de los toros originales, y de los de regalo. El martirio de ver este desfile de mansos afortunadamente ya  termina, se anuncia para la sexta corrida en definitiva que serán Castella y José Luís Angelino, con 3 de Teófilo Gómez y 3 de Los Encinos, quienes estén en la tarde de la confirmación de alternativa de Arturo Saldívar el próximo domingo… Nos Vemos.   

TUBERCULOSO ADIOS A UNA GANADERÍA ESPAÑOLA.

• Por Pedro Julio Jimenez Villaseñor  

SE DECIA… “Capotes que el toro aprieta”. Hoy lo cambio a un… “Cobijas que el frío llegó”… Vean porque lo digo y la fría triste noticia llegada desde España, la tuberculosis sigue pegándole duro a la ganadería hispana.  

ALGO ME recuerda esos románticos viejos tiempos de polvorientos caminos que de seguido se recorrían de aventones, de noches que debían de pasarse remendando los “fríos capotes”, convertidos en posteriores “calidas cobijas”, “fracturados” en las batallas con esas añoradas vacas peregrinas, con los enormes jorobados cebúes y astifinos toros criollos. No todo era malo, no era solo “coser y cantar”, lo mismo que “coser y torear”, existían otras motivaciones, inspiradoras guapas morenas, muchas veces inalcanzables, esos riquísimos almuerzos bañados con las salsas picantes que se acostumbran en los ranchos y que hidratábamos con pulque, con aguamiel,  esto levantaba el ánimo a cualquiera para estar listos en esas hoy desaparecidas tardes y continuar en la brega por lo que faltaba de torear en el novenario taurino. Nueve días de guerra.

NOVENARIOS POR las costas de Guerrero, de Jalisco, por el estado de Morelos, por el sureste mexicano, maletillas típicos de esos años, capotes y muletas decoloradas, banderillas usadas en decenas de festejos, vestidos “de luces”, de luces pero muy opacas ya, y desde luego que siempre con la compañía de algo que jamás podía faltar, una baraja para los relajantes conquianes. Así se vivía en la espera, muchas veces inútil, de verse anunciado con novillos de casta. Hoy acabamos de conocer en nuestrojaen.com, de Juan Muñoz, una noticia que nos ha dejado fríos, ahora ni con capotes o cobertores se puede disimular el pesar de muchos toreros a los que debe, la mala nueva, haber congelado. A continuación la mala noticia.

“LAS CUATROCIENTAS reses bravas de Isla Brava en Matapozuelos, entre sementales, toros, novillos y vacas han sido llevadas al matadero y procedido a su sacrificio como consecuencia del vaciado sanitario ganadero por causa de la tuberculina, enfermedad que se había extendido en estas reses que, además no eran de excesivo agrado para los toreros. El encaste de Santa Coloma, de Buendía y Martínez Elizondo con que empezó su andadura Trifino de Matapozuelos ha desaparecido para siempre de la faz de esta Villa vallisoletana. Trifino Vegas que cuenta con casi ochenta años, dobladas las espaldas y arqueados los huesos como consecuencia de los años de trabajo en el campo, además de otras dificultades, a las que se une sin duda alguna que ninguno de sus hijos haya seguido con las labores ganaderas, ha sopesado la situación y efectuado lo que mejor le viene a él mismo en estos momentos.

CREO ESTARAN de acuerdo conmigo que la nota es mala por donde la veamos, repito que ni capotes ni cobertores calentaran a muchos jóvenes que como dice la nota… “Tristeza sí, para los melancólicos, y esperanza también para buscar el saneamiento de la cabaña brava española. Y en el recuerdo, los momentos pasados en Isla Brava con los chavales que querían ser toreros, tentando las reses cárdenas de Trifino Vegas”… Hoy los “fríos capotes”, convertidos en posteriores “calidas cobijas”, “fracturados” en las batallas con esas añoradas vacas peregrinas, con los enormes jorobados cebúes y astifinos toros criollos, están de luto, hoy que por España tenían el lujo de contar los jóvenes con esa persona, el anciano que les proporcionaba el medio de entrenamiento, el destino le ha metido la espada hasta los gavilanes, con saña, terminando con su dehesa pero con la esperanza que esto sirva para prevenir a otros hatos. Que todo sea para bien y que este hombre tenga apoyo y consuelo de autoridades y toreros. Creo que esta viviendo una verdadera desgracia… Nos Vemos.   

CELAYA 2010

FOTOS FERIA JILOTEPEC 2010

LIZARDO Y CAPEA

las fotos son de Edmundo TOCA (clic´para ver más)

Miguel Ángel Perera corta Dos Orejas

 y sale a hombros. Zotoluco una Oreja a Toro de regalo 

• por Alfredo FLOREZ

05/12/2010

La quinta corrida de la temporada grande en el coso capitalino, resulto larga pero finalmente exitosa, con entrada buena sin llenarse los numerados y con buen clima y ambiente, aunque al final se sintió el frio invernal, calentado a base del valor y entrega de los toreros, siendo el triunfador con corte de dos orejas, el español Miguel Ángel Perera que finalmente salió a hombros y donde el maestro Eulalio López “Zotoluco”, corto una oreja a un toro de Garfias que fue de regalo y Octavio García “El Payo” se esforzó para poder triunfar, pero dejo ir el corte de orejas por fallas con la espada. Y el ganado de Campo Real no fue lo que se esperaba siendo solo un toro bueno, al que le corto las orejas Perera. Leer más...

Miguel Ángel Perera cortó dos orejas

en la Monumental de Insurgentes (5 diciembre 2010) 

• Alejandro Escárcega

En una quilométrica corrida de más de tres horas y media, en la cual se corrieron ocho toros de la ganaderia de Campo Real, propiedad de Don Juan Ignacio García Gómez, vecino de San Juan del Río, Querétaro y uno de la ganaderia de Garfias, el diestro de Badajoz, Miguel Ángel Perera cortó dos orejas y Eulalio López Zotoluco cortó una oreja en un toro de regalo de Garfias y Octavio García El Payo, aplausos en un noveno de regalo de Campo Real.

    

    Abrió el festejo Eulalio López Zotoluco (grana y oro) con Nevado, número 354, cárdeno obscuro salpicado bragado meano  y veleto con media tonelada de peso, al cual bregó del tercio a los medios y remató con media y revolera; quitó por chicuelinas y remató con una media para cartél. Con la pañosa, se llevó al astado templadamente de tercio a tercio y una serie de derechazos en la puerta de cuadrillas, se cambió a la siniestra para recetar una excelente serie de naturales; otra con la diestra, y al tercer derechazo el toro le apretó y resolvió con un apretado martinete, más natrurales, ahora en la puerta de arrastre; estocada y descabello para escuchar sepulcral silencio y aplausos al queretáno en el arrastre.

    

    El cuarto fué Ojos Negros, número 382, negro bragado y cornidelantero con 510 kilos, el cual saltó a la arena doliendose de la manita izquierda y fué cambiado por Jibarito, número 370, zaino y cornidelantero tocado del izquierdo con 530 kilos, el cual también fué protestado ruidosamente por su falta de trapío, sin torearlo el Zotoluco lo despachó de estocada y descabello, para escuchar silencio y pitos al toro en el arrastre.

    

    Regaló uno de la ganaderia de Garfias, Cascabel, número 16, cárdeno obscuro bragado y cornicorto con 520 kilos, en medio de gélido ambiente, verónicas y revolera con el percal y sin brindar, buenos derechazos en el tercio y mejor serie por el pitón siniestro; ya más acomodado, cinco series por la derecha en la querencia y un estocadón para cortar una merecida oreja otorgada por el juez de plaza Roberto Andrade y entregada por el alguacilíllo Armando Ortega.

    

    El torero de Badajoz, España, Miguel Ángel Perera (palo de rosa y oro), enorme con Quita Penas, número 332, cárdeno salpicado bragado meano calcetero caribello y cornivuelto con 485 kilos, verónicas a pies juntos entreveradas con tafalleras y gaoneras para poner a la Plaza de cabeza; quitazo por tafalleras cambiadas y gaoneras en la misma boca de riego; le brindó al cónclave capitalino qué hízo una buena entrada en la Monumental y con la pañosa, muletazos a pies juntos en el tercio y derechazos de vuelta entera; al natural, muletazos templadísimos al grito de "torero, torero" desde el tendido de sol y una estocada entregandose para cortar dos orejas que le fueron entregadas por el alguacilíllo el licenciado Arturo Ramos.

     

    El quinto fué Pica Piedra, número 358, entrepelado bragado y cornidelantero tocado del derecho con 525 kilos, con la pañosa, verónicas a pies juntos y en el tercer tercio, faena  a cuenta gotas a un toro débil y descastado; pinchazo y estocada para escuchar silencio y pitos al toro en el arrastre.

    

    Octavio García El Payo (sangre de pichón y oro) con Cuarentón, número 340, cárdeno bragado meano y cornidelantero vuelto con 470 kilos, verónicas con el capote y después de brindar a la afición, un péndulo con las zapatillas metidas en la montera, derechazos con cambiados por la espalda en el centro del redondel; con el acero, pinchazo y dos estocadas con un aviso entreverado para escuchar silencio y pitos al toro.

    

    El sexto fué Campanero, número 336, cárdeno bragado y cornivuelto tocado del izquierdo con 520 kilos, nada con el percal y con la pañosa; estocada caida para escuchar pitos.

    

    Regaló a Sorullo, número 380, negro bragado y veleto con 485 kilos, débil y rebrincón; seis series de derechazos en la puerta de arrastre y una de naturales, se adornó con ajustadas manoletinas y todo lo malogró con la toledana; tres pinchazos y media con un aviso apara escuchar los últimos aplausos del congelado público que se quedó hasta estas horas del festejo.

    

    La Fiesta Brava, Valor, Técnica y Sentimiento

    

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