LA
FIESTA SIGUE…
- por: Jaime Silva Gutiérrez
Viejo
título de una película española, del que no tomamos, pues es frase común en el
medio, ya que pase lo que pase tiene que seguir, a pesar de la invasión
marciana de enanitos verdes, de patrioteros políticos tricolores o de solo
colorados cambiantes según se presente la oportunidad, o bien de los que portan
semejantes colores al Puebla de la franja que al igual que el equipo futbolero
están que si se van a la división de ascenso o siguen dando petardos en donde
están.
Hace
muchos años encontré una frase de la que, lamentablemente, no guardé la
autoría y que se refería a la extinción
de la fiesta brava: “Ni Papas ni presidentes, han podido acabar con ella”;
cuanto razón, hasta la fecha ha tenido quien la escribió o la dijo, aunque lo que sí es de temerse es a los mismos que
viven de ella o en ella, que le están cada palo o fierrazo de herrerías que
¡cuidado! Y de ahí en adelante, todos los demás.
Y
me acordé de aquella película, por lo sucedido recientemente en personas de
nuestro medio local, hechos dolorosos, como lo fue la desaparición física del
que fuera novillero, aficionado practico y Juez de plaza don Héctor Fernández
Huarte, el pasado día 24 y pocos días antes la cirugía que sufrió en la pierna
derecha, el torero, empresario, maestro y guía-apoderado de novilleros Pedro Villalpando, que aún permanece
recuperándose en el Hospital de San Alejandro.
Nuestras
condolencias a la familia de Héctor. Palabras vanas serían las que dijéramos a
Pedro, sabiendo que es gente de carácter y que como buen taurino tiene que
echar el corazón para adelante, que bien ganado tiene el aprecio de sus amigos,
el reconocimiento a su fructífera vida aún de sus enemigos taurinos, el amor de
su familia de aquí y de su natal Monterrey.
Bien
sabido es que las cornadas sufridas por los toreros en la juventud, con el
tiempo llegan a causar daños, además de las dolencias naturales que con los
años se van presentando y Pedro, como tal las sufrió, pero como otros toreros
valientes: Carlos Vera “Cañitas”, “Curro” Ortega, Alejandro Alonso, casos
semejantes entre otros muchos, no se detuvieron, por el contrario fueron
siempre pa’lante. ¡Suerte Pedro!
Y
bien contento me puso la noticia recibida días antes, de que la fiesta sigue a
pesar de todo y de todos, en poblaciones como San Mateo Ozolco, allá cerquita
del volcán Popocatépetl, donde desde siempre, en el ruedo de vigas, con ganado
del rumbo, no ha dejado a haber fiesta taurina, a la que siempre concurrían
novilleros, maletillas y hasta algunos matadores de toros para disfrutar de las
buenas embestidas de los novillos.
Y
más que aún existen novilleros y principiantes en busca de pitones para hacerles fiestas a los
peludos, para irse preparando, aprendiendo a lidiar, no a dar “pases bonitos”, con
el mejor maestro que es el toro; a lidiar a un público exigente como el que más
y “placearse” para futuras oportunidades, y poder hacerse toreros.
Dos
festejos de feria, 21y 22 de septiembre, un novillero poblano, tres “soñadores
de gloria” también poblanos y ¡extráñese! un Oaxaqueño “Echaron la carpa”: Víctor
Barrientos, Alberto Languer, Luis Espejel, Alejandro Abascal y Bernardo López.
Quieren ser toreros. Ojalá lo logren.
Y…
¡Suerte!