Primer triunfador de la feria
Sábado, 28 de Marzo del 2009 Texcoco, Edomex.
Por: Jorge Raúl Nacif Enviado
No cabe duda que, como se ha dicho a lo largo de los años, el viento es el peor enemigo de los toreros, y hoy echó a perder la primera corrida de la feria de Texcoco, en la que sólo un entregado Paúl Cortés pudo tocar pelo gracias a una faena riñonuda.
El torero de Tulpetlac emocionó al escaso público que se dio cita en la “Silverio Pérez” cuando se abrió de capa con el cuarto de la función, y cuajó tres estupendas verónicas, embarcado bien las temperamentales embestidas de un toro que se acabó pronto.
Inició por alto su faena de muleta y prosiguió con una templada tanda con la diestra, misma que tuvo que cortar pues una banderilla lo golpeó con fuerza en el rostro. Recuperado, volvió a la cara y le endilgó otra buena seria de derechazos, reponiendo el terreno justo y alargando el trazo.
Cuando parecía que la faena subiría de tono, el toro se refugió en su querencia, pero hasta allá fue Cortés para, en base de pisarle sus terrenos, extraerle algunos buenos momentos, como un par de naturales que le resultaron de buena factura.
Tras terminar con la vida del burel de media estocada ligeramente caída, el público solicitó insistentemente la oreja misma que fue concedida y con la que Paúl dio una triunfal vuelta al ruedo.
Su primero fue un toro que pudo haber funcionado, pero el viento no le permitió hacer prácticamente nada a Paúl, salvó un par de derechazos que le fueron coreados con fuerza. Terminó de estocada entera y hubo leve petición de oreja que no fue otorgada.
Víctor Mora tuvo una tarde cuesta arriba. El primero de su lote era un toro con nobleza y que tenía recorrido, pero durante la faena de muleta fueron los momentos en los que sopló con más fuerza el viento, haciendo imposible los intentos del diestro por lucir.
Con su segundo se apaciguó el ambiente, pero el toro se llegó aplomado al tercer tercio y, cuando acudió a la muleta de Víctor, lo hacía por arreones y buscaba los mulos del diestro. Mora estuvo firme y se pegó un arrimón que no derivó en una posible oreja por sus fallas con el acero.
Aunque parezca paradójico, Jorge Delijorge tiene escaso valor para quedarse quieto, pero tiene un buen concepto del toreo. Y es que las pocas veces que paró pies cuajó muletazos de enorme calidad, como una serie de ayudados con la izquierda al primero de su lote.
De ahí en más, su actuación no trascendió mayormente y dejó en claro que, si quiere comer de esto, debe de entrenar mucho más y hacer un esfuerzo por aguantar las embestidas sin mover las zapatillas.
Ficha
Primera corrida de feria. Menos de un cuarto de entrada en tarde de mucho viento. 6 toros de El Vergel, muy bien presentados pero de juego desigual. Pesos: 490, 460, 460, 475, 475 y 492 kilos. Paul Cortés (gris perla y plata): Palmas tras petición y oreja. Víctor Mora (nazareno y azabache): Silencio y silencio tras aviso. Jorge Delijorge (rosa y oro con remates negros): Palmas y silencio.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Tus comentarios a esta entrada