Texcoco inició Taurinamente con el pie derecho: 4 Orejas, dos a Pablo y dos a Macías | |||
Alfredo FLOREZ | 16/03/2009 | ||
Texcoco, Estado de México 16 de marzo.- Nuevamente en manos de Santa Julia Espectáculos dio inicio taurinamente hablando la Feria Internacional del Caballo 2009, con una corrida de pre-feria, donde con todo el profesionalismo que caracteriza a este empresa, se dio la corrida casi con lleno en la plaza de toros “Silverio Pérez” donde se obtuvo el triunfo por parte del rejoneador navarro Pablo Hermoso de Mendoza que corto dos orejas y el del matador Arturo Macías con igual número de trofeos, para salir a hombros al final en una corrida que abre el serial gracias al convencimiento del empresario Marco Castilla de que viniera el rejoneador navarro a despedirse de la afición de México en esta plaza y con un triunfo más, cerrando su periplo de esta campaña por América. Se lidiaron dos toros de "Fernando de la Mora" para rejones y cuatro de la ganadería de "Marrón" que resultaron buenos para la lidia y don Fernando de la Mora fue sacado a dar la vuelta junto con Pablo en el segundo de su lote. |
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Con certero rejonazo mató Pablo a su segundo
para dos orejas. Foto: Cortesía MAJ
Se dio la primera corrida de la Feria Internacional del Caballo Texcoco 2009 con sendos triunfos del rejoneador Pablo Hermoso de Mendoza y de Arturo Macías, quienes cortaron dos orejas cada uno y salieron a hombros entre los entusiastas aficionados que no se cansaron de aclamarlos por sus brillantes intervenciones en el coso Silverio Pérez, que por un pelito no se llenó.
La tarde se inició con un sol brillante y calorcillo primaveral, pero después apareció Eolo que dejo sentir su fuerza, además acompañado de un frío, si no polar, sí que calaba hasta los huesos que levantó feas polvaredas y por momentos deslució la labor de los diestros, que con tal de agradar no hicieron caso echándole valor sereno.
ENCIERRO
Se jugaron dos astados de Fernando de la Mora para rejones; el primero, que se dejó meter mano, manseó y fue tardo en la embestida y el otro se prestó para el lucimiento del caballista, fue bravo, acudió a los embistes con emotividad y permitió hacer su toreo a Hermoso de Mendoza, que se regodeó a lo largo de la faena.
Cuatro fueron de José Marrón Cajiga, muy bien presentados, pero sobrados de kilos que les impedía desplazarse y tiraban a defenderse. De ellos el corrido en tercer lugar fue el que caminó, embistió con claridad y fue bravo. Los otros fueron pitados por sosos, poca emotividad y no transmitían mucho a los tendidos.
PABLO
El centauro de Navarra cerró su campaña cubriendo 25 festejos incluyendo la de la Plaza México, que es la que lo dejó satisfecho y se mostró feliz de la vida de haber regresado al coso capitalino. Terminó Pablo con un triunfo y una salida a hombros en Texcoco, sin ser de los mejores que ha tenido pero sus faenas no tienen desperdicio y mantuvo a los aficionados, que le quieren bien y le aplauden. Utilizó sus estupendos caballos como Mujeriego, Bribón, Pirata, Estella, Silveti.
Jerezano fue su primero al que le hizo una faena sin mucha brillantez por el juego que dio su enemigo. Fue tardo en la embestida y suelto al repetir, pero estuvo muy certero con el rejón de castigo, banderillas a una mano, clavando de frente, al estribo y banderillas cortas. También lo toreó y enceló para que acudiera y por momentos lo dejó llegar muy cerca. El toro se aplomó y cortó por lo sano. Un metisaca y un rejonazo para retirarse en silencio.
Con su segundo entusiasmó a la clientela en alto grado y luego de torearlo templadamente se fue al centro del anillo y ahí le clavó el único rejón de castigo. Se dio a clavar los demás fierros con elegancia y prestancia. Banderillas al cambio y alegrándolo con rutinas a la alta escuela y el piafe. Algunas de las suertes las hizo teniendo como fondo el corrido michoacano de Juan Colorado. Banderillas cortas y hasta el teléfono le hizo. Se fue de frente con Mujeriego y clavó un rejón en todo lo alto para que doblara la res y dos orejas concede el juez, regateando la segunda.
GARIBAY
Ignacio Garibay, sin desdibujarse, mantuvo su verticalidad y deseos, pero cuando estaba toreando empezó a soplar el viento con fuerza. Arturo Macías en su turno al quite se echó el capote a la espalda gallardamente para cuatro ceñidas gaoneras que voltearon a la plaza. Garibay le replicó con Chicuelinas ajustadas y terminar con una larga cordobesa. Tres extraordinarios pares de banderillas de Armando Ramírez "El Bambam" para saludar en el tercio. El toro manseó, salía suelto de la suerte y se fue a refugiar en tablas donde Nacho intentó hacerle faena. Mal estuvo con la espada y se retiró en silencio.
Con su segundo mejor su actuación. Y se lució toreando a la verónica y en quites con chicuelinas y una vistosa larga cordobesa. Este toro también salía suelto e intentó sujetarlo sin beneficio alguno. Además termina con la cabeza arriba y topón. Aun así le sacó dos soberbias dosantinas. Garibay le buscó las cosquillas sin recompensa. Media y dobló la res.
MACÍAS
Quien puso de cabeza la plaza fue el aguascalentense Arturo Macías, que aprovechó en toda su intensidad a Faraón, que salió con muchas patas. A despecho del viento le arrancó chicuelinas ajustadas y en quite por tafalleras e inició la faena con espeluznante péndulo, pues el viento podía descubrirlo. Se dio a torear por la derecha con templados muletazos y bajando la muleta para evitar el viento. Naturales soberbios. El toro se empezó a quedar corto y Macías se jugó la piel aguantando el viento en forma dramática. Más naturales, cambios de mano y otros adornos escuchando el ¡Viva Aguascalientes". En reconocimiento a lo que estaba haciendo. Se perfiló a matar y se entregó en verdad, saliendo rebotado y con la taleguilla desgarrada y por el otro lado cayó el toro muerto obligatoriamente. Dos orejas y vuelta triunfal.
El que cerró plazas no tuvo un pase. Desde el principio se aplomó y por más que Arturo le insistió poco le pudo hacer. Pero lo recibió con dos largas cambiadas. En quites un combinado con chicuelinas, tafalleras, gaoneras y la caleserina. Ese toro se lo brindó al querido matador Juan Silveti, quien se llevó una carretada de aplausos. No había forma de que embistiera ese toro y terminó toreando por alto. Tardó en doblar y escuchó un aviso. Luego lo sacaron a hombros.
ESTO
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