15 de abril de 2010
Foto: Emilio Méndez
Se les olvidó que la calidad hace la diferencia
- Miguel Ángel García
En términos claros, el valor del matador Arturo Macías y el sitio que en México ha conseguido no está siendo respaldado por su administración española, quien según señaló, allá Arturo es un total desconocido y en pocas palabras, o traga, o traga.
Sólo hay que señalar que ni de aquí ni de allá, un matador había conseguido más de cinco salidas consecutivas a hombros, o puertas grandes, de la plaza México. ¿Acaso esto lo convierte en un torero desconocido allá? ¡Joder! Pues que más tiene que hacer un torero mexicano para ser reconocido en la Iberia.
Suponemos que la administración del torero mexicano en España vio en Arturo Macías una muy buena oportunidad económica para llevarlo a hacer una campaña en los mejores cosos de Europa, porque ir allá con apoderado y toda la cosa, cuesta mucho. Sin embargo, ¿qué no se dieron cuenta de cómo había sido llevado Macías en México los últimos años? Porque claro, Sevilla es una de las mejores plazas de España y en ésta su feria, estuvo presente Macías, el máximo exponente actual de la torería mexicana, aunque en un cartel pobre y ante un ganado miserable que Macías nunca hubiera lidiado aquí.
Y es que en México la empresa Espectáculos Taurinos de México, quien lleva su administración, marcó una gran diferencia en cuanto a calidad en la carrera de Arturo Macías, llevándolo a alcanzar el alto nivel del que hoy goza en México, además del sitio y ambiente que ha ganado en todos los cosos de la República Mexicana. Sólo hay que echar un vistazo al ganado que lidia aquí y a los carteles donde se le anuncia. Vaya, Arturo se fue de México convertido en una figura mexicana, cómo es posible que llegue a España como un simple desconocido, a torear lo que sea y con quien sea, porque según él no está en condiciones de exigir ganado ni alternantes. Y estos son argumentos de su propia administración española.
Será más bien que la administración española de Arturo Macías no ha tenido la suficiente fuerza para apoyar a un torero con todos los atributos y argumentos. Porque una cosa es que Macías toree en las mejores plazas españolas y otra que sea con las mejores condiciones y garantías para que siga triunfando como lo ha hecho en México. Porque de cornada en cornada, de Arturo solamente nos regresarán a un torero que, "tenía mucho para ser figura, pero las cornadas no se lo permitieron", como me dijo un aficionado.
Ahora, si es que a la administración de Arturo Macías le "rompe las pelotas" los aficionados mexicanos que la censuran de como están llevando al aguascalentense, pues que le cedan la estafeta a alguien con más tablas en el taurinismo europeo. Fácil.
En resumen: En México, Arturo Macías es tratado como figura. En España, no. En México los apoderados de Macías siempre le han brindado las mejores condiciones para el triunfo. En España, no.
Sí, es cierto lo que dijo Arturo Macías antes de viajar a la Iberia: "Voy porque no me gusta ser un torero cómodo en México". Sin embargo, ¿a costa de qué precio?
Sabemos que el mexicano desborda deseos de llegar a ocupar un sitio histórico en el toreo y estamos de acuerdo que tiene con qué para lograrlo, lo que no concuerda es cómo fue a aceptar este tipo de condiciones para torear allá.
"Voy a hacer una campaña con toda la categoría", también dijo Macías antes de viajar. No dudamos ni tantito de las grandes capacidades de nuestro paisano para salirle a todo cuanto le echen por toriles, de lo que dudamos es la falta de categoría que su administración está teniendo para con uno de los mejores toreros que nuestro México ha dado en los últimos años.
Arturo Macías, señores, vale más y no es ningún desconocido.
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