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| Diego Silveti |
“Los Tres Mosqueteros”
- Por: Antonio Casanueva
Durante esta temporada grande han retornado a nuestro país jóvenes matadores de toros con grandes posibilidades y perspectivas, quienes han sido formados del otro lado del mar, regresando al terruño para competir con las figuras actuales, tal y como lo pueden ser Diego Silveti, el miembro mas joven de la antigua Dinastía Familiar, Arturo Saldivar de Tauromaquia Mexicana, así como el mas recientemente alternativado en la mayor plaza del mundo; Juan Pablo Sánchez. Quien con tan solo 19 años cumplidos y con unos cuantos festejos toreados en nuestro país, se ha presentado en la plaza capitalina con gran éxito, sorprendiendo a los aficionados capitalinos quienes en su mayoría no lo conocían, sabían de sus hazañas en ruedos españoles únicamente a través los medios.
Seguramente por las razones expuestas, la prensa especializada de nuestro país, tan dada a las especulaciones, les ha dado por identificarlos como los sucesores de aquellos inolvidables personajes de los años cuarenta, llamados LOS TRES MOSQUETEROS, por ello,“Rincón Taurino” aprovechando tan reiteradas referencias y lejos de compararles con aquellos inolvidables personajes de nuestra torería, se conforma en esta ocasión, simplemente con recordar el historial de aquellas figuras de antaño: como lo fueron el hidrocálido Rafael Rodríguez, Jesús Córdoba, Manuel Capetillo y porque no, al llamado D’artagnan de aquel grupo; Paquito Ortiz. Inolvidables personajes quienes tanto individualmente como en conjunto, llenaron toda una época de la Fiesta Brava de nuestro país y que con el paso del tiempo, han quedado convertidas en grandes figuras de la torería mexicana de todos los tiempos, esperando por supuesto, que los jóvenes mencionados al inicio de este artículo, puedan convertirse, llegado el MOMENTO, en los sucesores de sus glorias, triunfos y posición histórica, a poco mas de medio siglo de distancia, pero vayamos por partes.
Aquel grupo de los llamados “Tres Mosqueteros”, el que estuvo formado por un conjunto de novilleros procedentes de diversas partes del país, quienes buscando fama y fortuna, coincidieron en la capital, presentándose en la plaza Monumental México, durante el verano de 1948 a partir del 13 de junio y hasta el 5 de diciembre de ese mismo año, organizándose durante esos meses un total de 26 novilladas, antes de las cuales el coso, luego de permanecer cerrado por varios meses y requerir un cambio total en su administración, reabrió sus puertas, para dar cabida en su mayoría a nuevos y totalmente desconocidos novilleros en dicha plaza, así como algunos otros con ciertas actuaciones previas, destacando:
Manuel Capetillo, quien tanto por la extraordinaria calidad de su toreo, como por su grata y espléndida personalidad llegaría a ser nombrado con el tiempo, por el prestigiado periodista don Alfonso de Icaza; “Ojo” del semanario especializado “El Redondel y con sobrada razón como “El Mejor Muletero del Mundo”.
Nacido en Guadalajara, el 15 de abril de 1927, se inició en la profesión por la convivencia con su propia familia, en particular de un hermano de su padre, de quien se dice fuera un asiduo aficionado, debuto en la plaza de El Progreso de Guadalajara el 9 de noviembre de 1947, actuando como sobresaliente, tarde en la que realizó un sorprendente quite por Fregolinas, que le fue muy aplaudido, ganándose la repetición en la novillada del domingo siguiente, actuando dentro del cartel de aquella tarde, saliendo a hombros de los aficionados, quienes festinaban su gran actuación.
Su aparición en la Plaza México fue el 8 de agosto de 1948 durante la mencionada temporada organizada por el empresario Dr. Alfonso Gaona, armando una tremenda escandalera por su toreo de capa y repitiendo al domingo siguiente y cortando su primera oreja en esa plaza al novillo “Saltador” de la Punta, reapareciendo en la misma plaza la tarde del 5 de septiembre del mismo año, fecha en que realiza su primera gran faena en dicho coso, al novillo “Valenciano” de Pastejé aunque pierde los trofeos que merecidamente tenia ganados al fallar lastimosamente con la espada,
Para repetir ese gran triunfo pero ahora si matando bien a su enemigo, obteniendo por petición popular las orejas y el rabo en la novillada efectuada el 16 de septiembre para concluir brillantísimamente esa temporada por su faena al toro “Naviero”, ganado en esa fecha el trofeo de “LA ROSA Guadalupana” que disputara en esa tarde.
Con tan magnífico desempeño durante los festejos novilleriles, Capetillo recibe la alternativa el 24 de diciembre de ese mismo año en la plaza Colón de Querétaro, siendo su padrino Luis Procuna y testigo el otro y mas destacado “Mosquetero” Rafael Rodríguez, y “Juchitero” de la Punta, el toro de la ceremonia recibiendo una cornada al final de la corrida. Confirma en la Plaza México el 23 de enero del año siguiente, siendo en esta ocasión Luís Castro “El Soldado” el padrino de la ceremonia, quien le cedió al toro “Muñeco” de San Mateo. siendo el testigo el leonés Antonio Velázquez. para confirmar dicha alternativa en Madrid, España durante su segundo viaje a ese país el 15 de mayo de 1952 de manos de Paquito Muñoz, testigo Antonio Ordoñez , el toro de la ceremonia de nombre “Brillante” de don Antonio Perez Tabernero.
Luego de largas temporadas y grandes triunfos tanto en nuestro país como en el extranjero los que sería largo enumerar, destacando sin duda aquella de el toro “Tabachín” de Valparaíso realizada en la plaza capitalina el 17 de febrero de 1962 y que el mismo reiteradamente consideró como la mejor faena de vida, se despide del público capitalino el 25 de febrero de 1968, para finalizar su carrera en El Progreso de su natal Guadalajara el 10 de marzo del mismo año y aunque se sabe que haya vuelto a torear en diversos cosos de la república, pero nunca mas lo hizo en la capital, muriendo a la avanzada edad de 83 años el martes 5 de mayo de 2009….
La próxima semana continuará.
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