30 enero 2012

13a. corrida en La México: CORNADA GRANDE A JUAN PABLO SÁNCHEZ

lleva el cate...
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Como dijo Pepe Moros: ...cuando hay toreros no hay toros.
  • Zotoluco.- aplausos - división -  (mató el toro que hirió a Juan Pablo) 
  • El Juli.- al tercio - aplausos - aplausos en el que mató por Juan Pablo.
  • Juan Pablo.-  cornada grande 20cm muslo izquierdo.
  • toros de Fernando de la Mora.- deslucidos complicados. buena presentación, cara seria bien armados. malos en general, se salva el 1º. cumplieron con con los caballos - tumbo del 2º.
Entrada.- Se llenó el numerado, el general casi vació
Clima.- frio - viento que molestó toda la tarde, empezó a llover al final. 
Palco.- Jorge Ramos sin problemas

por Oscar MEJÍA

Eulalio López El Zotoluco: Faena medida  y tersa sin una nota de más ni de menos alcanzó el chintololo con su primero, fue una faena  de gran mérito aprovechando la bonachona embestida del cárdeno de bella lámina. Tandas de bruñido mérito con ambas manos dieron motivo a las primeras ovaciones de la tarde, pinchó 2 veces a toro parado para terminar con entera. Al tercio.
Soso y deslucido fue el otro con el que lo más destacado fue la voluntad del torero, pinchazo y entera y se retira Eulalio oyendo palmas. 

De Julián López el Juli no hay más que decir, de siempre ha sido paradigmatico su profesionalismo y esta vez no fue excepción. Ha estado el peninsular casi mexicano muy por encima de las condiciones de aspereza, sosería y mal estilo de los tres a los que se enfrentó ante la incomprensión de algunos en el tendido, pero valorado por la mayoría. El día 5 tendrá dos toros más.   

Juan Pablo Sánchez: mientras permaneció en el ruedo en su primer turno el chamaco de Aguascalientes confirmó  sus grandes cualidades. El temple que atesora lucía esplendoroso cuando a la mitad de un natural el toro tiro el certero hachazo que casi le atravesó el muslo izquierdo. 
Con la pierna chorreando sangre pidió le pusieran un torniquete, para mostrarnos el torero que lleva dentro volvió sin espavientos a la cara para finiquitar a su heridor. Al irse sobre el morrillo la espada resbaló en un arpón de banderilla quedando a merced siendo prendido aparatosamente y retirado por las asistencias a la enfermería de donde contra su voluntad ya no pudo salir. 
La herida, reporta el médico Vazquez Vayod, es grande pero no de gravedad. 


Buen puyazo de Cesar Morales.

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