21 agosto 2008

LECTURAS


El Toreo de la Condesa dejó de funcionar el 19 de mayo de 1946.


A los Toros

Por: A los Toros A Los Toros

El Toreo de la Condesa dejó de funcionar el 19 de mayo de 1946. En esa época el accionista mayoritario de El Toreo, S.A. era el general Maximino Ávila Camacho, personaje de la historia nacional, aficionado a la fiesta brava y ganadero de reses de lidia.

El general Ávila Camacho falleció el 17 de febrero de 1945 y sus deudos donaron las acciones del coso taurino a la beneficencia pública, que era representada por la Secretaría de Salubridad y Asistencia.

Posteriormente, el 17 de abril de 1946 se dio a conocer que el inmueble había sido vendido a la Compañía Fraccionadora del Sr. Ángel Urraza, quien fue el creador, entre otras cosas, de la Colonia del Valle de la Ciudad de México.

Ángel Urraza vendió al ingeniero Bernal la estructura metálica de El Toreo, y éste a su vez la trasladó a Naucalpan de Juárez (Cuatro Caminos) exactamente en la línea de separación del Distrito Federal con el Estado de México.

El Toreo entraba a funcionar de nuevo, aunque en diferente ubicación. El 23 de noviembre de 1947 se dio al corrida inaugural, el cartel lo integraron Lorenzo Garza, Luis Castro “El Soldado” y Jorge Medina, que recibió la alternativa con un encierro de San Mateo.

La plaza de El Toreo de Cuatro Caminos funcionó ininterrumpidamente hasta 1968, año en que se anunció que sería cubierta para dar paso a la presentación de diversos espectáculos, los cuales estarían protegidos ante las inclemencias del tiempo (aire, frío y lluvia). La última corrida que se dio en esta etapa fue un mano a mano entre los regiomontanos Manolo Martínez y Eloy Cavazos el 29 de diciembre, con un encierro de Garfias.

Pasaron 26 años para que El Toreo se reabriera y el cartel fue integrado por José María Manzanares, Manolo Arruza, Fermín Espinoza y Pepín Liria con toros de Vistahermosa el 15 de octubre de 1994. Se dieron 12 festejos, dos de ellos con actuación de rejoneadores, en los que resultó triunfador el murciano Liria, el cual obtuvo 5 orejas en 4 actuaciones.

Al término de esa pequeña temporada, de nuevo se cerró la plaza de Cuatro Caminos y no se reabrió sino hasta el 28 de abril de 1996, fecha en que se dio inicio a una polémica temporada en la que se dieron 10 festejos.

La última corrida de toros que se dio ahí (no se anunció la despedida del coso como escenario taurino), el cartel lo integraron el rejoneador Pedro Luceiro hijo y los matadores Javier Escobar “El Fraile”, Manolo García Méndez y Manolo Sánchez con un encierro de Quiriceo. A partir de esa fecha, El Toreo de Cuatro Caminos no volvió a funcionar como Plaza de Toros.


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