19 enero 2010

José María LUÉVANO, 15 AÑOS DE MATADOR DE TOROS



          El Matador José María Luévano, nace un doce de diciembre de 1973 en la ciudad de Aguascalientes, inicia su carreta taurina a la edad de once años, dando sus primeros lances en la plaza de toros San Marcos, encaminado por el conocido taurino y empresario José Luis Ramírez “El Padrino”; debuta como becerrista en esta misma plaza llamando la atención por sus formas e intuición taurina, cortándole el rabo a un becerro de Garabato.

          Debut como novillero: Aguascalientes, el 7 de octubre de 1990, alternando con Alberto Ortiz, César Alfonso Ramírez El Calesa, Ricardo Márquez, Alejandro de Anda y Juan Carlos Sánchez

          Presentación en la Plaza México: 16 de agosto de 1992, con Arturo Manzur y Alfredo Ríos “El Conde”, con novillos de Manolo Martínez.
          Su etapa como novillero, esta marcada por el apoyo que recibió por parte del Maestro  Manolo Martínez; en la cual estuvo a su lado recibiendo la enseñanza de la técnica de esta gran figura del toreo.
          Durante esta etapa, toreó 132 novilladas a lo largo del país, cortando 167 orejas y 5 rabos y 4 indultos.

          La temporada de novilladas  de la Plaza de Toros México en 1994 fue la que lo proyectó como novillero puntero y catapultó hacia la alternativa.
  
          En dicha temporada actuó 5 tardes, cortando  4 orejas, terminando como el máximo triunfador de este serial.

          Alternativa: León, Guanajuato, el 20 de enero de 1995. Padrino: Miguel Espinosa Armillita. Testigo: Manolo Mejía. El toro de la ceremonia se llamaba "Don Juan", de la ganadería de Begoña.
          Confirmación en la Plaza México: el 14 de enero de 1996. Padrino: Miguel Espinosa Armillita. Testigo: Enrique Ponce. Toro "Payaso", res de Carranco.
          La Temporada Grande 2002-2003 se alza como máximo triunfador, cortando un total de 7 orejas que lo colocaron en un sitio privilegiado dentro de la baraja taurina mexicana
          Confirmación en Las Ventas: en la tarde del 15 de agosto de 2004. Padrino: Fernando Cepeda. Testigo: Sergio Martínez. Toro: "Ribereño", de la ganadería de El pizarral.

Estadísticas del Matador José María Luévano:

  • Corridas toreadas:   343
  • Trofeos: 457 orejas
  • Rabos: 27
  • Indultos: 15

Corridas en la Plaza de Toros México: 11 tardes, cortando 9 orejas.

José María Luévano  se ha distinguido por actuar en las principales  ferias de México y acartelado con figuras del toreo mundial y obtenido triunfos resonantes que lo han llevado a conquistar trofeos como: Trofeo Domecq al Máximo triunfador de la Plaza de Toros México, Trofeo Manolo Martínez, Trofeo  a la mejor faena  de la Feria de San Marcos, Trofeo La Rosa de Plata de Jerez, Trofeo Ocho Columnas de Guadalajara a la mejor faena, Trofeo Mal de Montera a la mejor faena de Guadalajara, Trofeo Cuauhtemoc – Moctezuma a triunfador de Orizaba Ver. Trofeo Televisa Deportes. Trofeo Oreja de Oro de la Plaza de Toros México, Trofeo Oreja de Oro de la Feria de San Marcos.


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“ Una de las vocaciones mas auténticas que conozco, dentro de los toreros de la esperada generación del relevo taurino en nuestro México, es sin duda la que ha manifestado José María Luévano, me ha tocado presenciar su desarrollo taurino. El toreo de Luévano esta dotado del misterioso atavismo de nuestra raza, que se proyecta en el trazo desmayado de sus lances y la desgarrada largueza de sus muletazos, como un grito interior que se manifiesta sin ataduras cuando torea, su vocación está impregnada de pasión en un torbellino de emociones que no puede controlar.

 Por esto, de pronto llega a instalarse en el clímax del sentimiento artístico, cuando llega a la cara del toro, se crispa por que sabe que en cada cite, se va a  encontrar con el prodigioso milagro de expresar su misterio taurino tan profundo y vibrante como los ángeles y demonios que sostienen su pasión taurina.

Torear para Luévano es como respirar, si no torea no existe, es un ejercicio del alma que le permite desatar sus pasiones y razones para vivir, someter su espíritu al embrujo del toreo con la posibilidad de abandonarse y olvidarse del cuerpo, para que solo el pulso de sus muñecas guidas por los hilos del alma, dejen salir su desgarrado grito interior.”
                                           
       Enrique Rivas.   Periodista Taurino.       
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    El matador José María Luévano y su apoderado el Matador Adolfo Guzmán agradecen el apoyo que  se le ha brindado a lo largo de estos XV años como matador de toros a todos aquellos amigos periodistas, que han visto el desarrollo de su carrera, esperando que esta temporada Grande de la Plaza de Toros México, se convierta en  un triunfo importante y que lo catapulte a su consolidación como Figura del Toreo.          
                          
 ¡GRACIAS!


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