Ortega quiere que su nombre vuelva a aparecer en esas placas donde solo tienen cabida aquellos que han cortado los máximos apéndices. Foto: Ricardo Aldayturriaga
Rafael Ortega y Sebastian Castella tendrán un mano a mano en la Monumental de Insurgentes
- Guillermo Leal
Ciudad de México (5 febrero 2010).- Faltaban 24 horas exactas para celebrar los 64 años de la Plaza México, no vestía de luces y aunque el coso estaba solo, Rafael Ortega exhaló cuando su mirada se internó en las penumbras de los tendidos del escenario más grande del mundo en una reacción natural de quien sabe de la emoción y responsabilidad de estar ahí.
Ayer, poco antes de las siete de la noche, hora en que hoy inicia la corrida, llegó el tlaxcalteca a la Monumental de Insurgentes donde hoy cumplirá su actuación 40 como matador
"Festejar a la Plaza México y mis 40 corridas es un motivo de orgullo. Doy gracias a todos quienes me lo han permitido. Espero que mañana (hoy) sea una noche en la que haya triunfos y felicidad en el público", aseguró Ortega, una de las figuras del toreo mexicano.
En lo que será su segunda actuación en una corrida de Aniversario y también la segunda nocturna, hoy alternará mano a mano con quien es su ahijado de confirmación de alternativa: el francés Sebastián Castella.
"Es una gran figura mundial del toreo y me enorgullece poder disputarle las palmas como torero y en nombre de México", apuntó.
Rafael reconoce que la faena que le valió dos orejas el pasado 17 de enero le dio el pase directo a este festejo de Aniversario.
"Esa tarde fue muy bonita, demostré al público el toreo que, cuando se puede, me gusta hacer y esa faena fue por la que me gané que la empresa me invitara a este festejo", aseguró Ortega quien precisamente esa tarde alternó con Sebastián Castella quien realizó una faena que merecía el rabo pero que dejó ir por sus fallas con la espada.
Mientras respondía a las preguntas, Ortega seguía admirado de la paz que se vivía en aquella Plaza México ya bajo la noche.
"Es imponente, qué bárbaro. Yo creo que tenía cuando menos diez años de no pisar el tendido de la México y de noche, nunca, pero es majestuosa, esta plaza es impresionantemente imponente", aseguró emocionado el torero de Tlaxcala que a lo largo de su carrera en este escenario ha conseguido lidiar 78 astados, cortar 47 orejas y un rabo.
"Recuerdo aquella tarde del 2004 cuando corté mi primer rabo en la México, fue el 117 en la historia de la monumental y es uno de mis trofeos más importantes, uno de los que guarda un lugar especial en mi vida", reconoció el torero tlaxcalteca mientras observaba una de las magnas placas que contienen los nombres de los 123 rabos que se han cortado en la monumental capitalina.
Para el francés Sebastián Castella es su debut en una corrida de Aniversario en la México.
"Es algo muy emotivo por el hecho de torear en el cumpleaños de esta plaza tan importante. Yo siempre había querido hacerlo y la verdad me da mucho gusto hacerlo aún sin haber cortado las orejas aquella tarde, aunque como lo dije en su momento, la faena es la mejor que he realizado aquí", apuntó el francés.
Será lidiado un encierro de Los Encinos, propiedad de Eduardo Martínez Urquidi, una de las ganaderías que en la México se han apuntado triunfos de mucha valía, pero sobre todo un criador que se compromete con el trapío y la bravura de los astados, que al fin y al cabo es para lo que deberían trabajar todos los criadores de bravo
REFORMA
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