TARJETA ROJA
La empresa de la Plaza México en la segunda de la temporada de lluvias trajo un encierro digno de la ganadería De Haro, que entre trapío y bravura le dio seriedad a la tarde en la línea ganadera y fue factor de suma determinante para que el pánico escénico se hiciera presente y apañara a un chaval al grado de haberse auto-expulsado de la alineación del ‘Tri novilleril’, por lo demás a la naciente temporada se sumo otro torero solvente David Aguilar el que si se pone ‘águila’ puede volar alto y retomando el asunto de la ‘tarjeta roja’ que se echó encima el prófugo del toreo, no merece más escala que la comprensión ¡si! porque el pánico es una enfermedad sexual que disminuye los cojones y para los que crean que este acto es inusual, los convido a ver la joya de la pantalla torera, ‘Juncal’.
LA COSA ESTA DE LA PATADA
Ahora que estamos inmersos en esas cosas de la patada donde en el primer tercio los antes verdosos y hoy de ‘catafalco y azabache’ que los apodera un ‘Vasco’ y que en la tarde inaugural no supieron estructurar la faena y se vieron sin sitio frente a los ‘zaínos’ que de paso sea dicho no lucieron mayor trapío al grado que se llego a pensar que el niño ‘Santito de Tacuba’ y el ‘Barrilito de Yucatán’ podían hacerle más fiestas que el ‘Gio’ y el ‘Chícharo’, bueno mejor vamos con el ‘Barrilito’ digo con Michel (ito) que más bien es un drama porque la verdad que el caso de este ‘híbrido’ al que su padre viste de lentejuelas para a costa de su vida, exprimirle unos peniques con el señuelo de que se va a ver torear al ‘carajito’ más pigmeo de la novillería, lo cual es macabro y que conste que a mi me importa un reverendo cacahuate que se lo cargue ‘el payaso’, pero lo que si me importa que por un ‘Puñado de parné’ se prostituya a un chalao y que se engañe al publico y por ende se lastime a la fiesta, a la que pronto se va a ensangrentar y con ello se destapara la caja de pandora desde cuyas entrañas saltaran los anti taurinos y van a armar tal desmadre que se va a oír hasta el limbo y con razón, pues una cosa es ver a ‘Lagravesito’ escenificando su ‘Toy history’ y otra será ver a Michel (ito) protagonizando el Teletón y para no salirnos de este melodrama, sentencio, que lo mismo, pero en color de rosa, va a ocurrir con las ‘boquitas pintadas’ las cuales no me preocupan como tales, pues ya están grandecitas y pueden hacer con su palmito lo que les venga en gana, lo que si me altera es que el desenlace será el mismo y la fiesta va a ser la pagana y que conste que estoy hablando del niño, no del ‘torerín’ que torea con un túnel de por medio que no se embrageta, que expulsa al animalito mañosamente escupiéndolo de la suerte, aunque quiera disimularlo dando el panzazo al más puro estilo del otro ‘costal de mañas’ el pequeño regio, el que ahora mendiga a los políticos ‘toreándoles’ para ver si liga un ‘hueso cabritero’ y hasta un aplauso para saciar su enfermiza voracidad de exhibicionismo ¡que tristeza!
MUJERES EN FUERA DE LUGAR
A mi que un ‘par de tetas me jalan más que una carreta’, que me ponen jarioso las ‘gachís’ del tendido de sol, que me encienden las ‘mariposillas’ de la calle de San Pablo, que me ponen cachondo las ‘meretrices’ de la ‘Burbuja’ y del ‘Balalaika’, que me prenden las ‘pirujillas’ de Sullivan, que me alebrestan las chamorrudas del ‘Negresco’, que no olvido a las ‘tacón dorado’ de la ‘Casa de la Bandida’ o a las ‘Hermanas de la vela perpetua’ del convento del ‘Chichonal’ que tanto se me antojan, nunca pensaría en desbordar mis cochambrosas pasiones mentales, ni mis fantasías lujuriosas yendo a ver a unas damiselas, que se estruja en un terno de bravío arlequín, que por la naturaleza de su confección le secuestra sus encantos planchándoles las nalgas y axfigciandoles las ubres y que con listones de colores se adornen las mechas al estilo de las yeguas de rejoneo y si a eso le agregamos que por obvias razones de constitución ósea y muscular su fuerza es menor a la de todos los hombres y a la de muchos gays y de valor, pos ya pa’ que hablemos, bueno reconociendo que a unas si les aflora por momentos, cualidades éstas, indispensables para pasarse por la faja, que no por la tanga, al toro, entonces yo les pregunto a esos calenturientos, morbosos, libidinosos del tendido, defensores de una causa que no necesita defenderse por lo estéril y efímera ¿qué tanto les alaban a las damitas toreadoras, hasta hacer creer a los empresarios que son un atractivo?, pero ¡cuidado señores!, porque la lujuria en cualquiera de sus manifestaciones, es pecado y eso es ¡horroroso! y como dijo el diablo ‘no quememos la pólvora en infiernillos’ y mejor usémosla cuando haya novilleros machos porque la fiesta es una guerra donde las ‘adelitas’ están para procrear a los valientes que mueren en el campo de batalla, en un trueque lícito del arte por la gloria.
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