22 agosto 2013

LAS CHARLAS CON EL BARDO DE LA TAURINA

CASOS  MÉDICOS
                Paulo Campero con la carne abierta
 Cuando la fiesta sangra  es drama y se sufre, como ocurrió el pasado fin de semana en la Plaza México,  cuando el novillero Paulo Campero fue herido por el primer burel y su espíritu indomable lo mantuvo de pie hasta terminado el festejo, momento en que fue intervenido quirúrgicamente de la cornada que le había inferido el castaño, lo que se realizó en la enfermería del coso dentro de la obligatoriedad que tiene la empresa de proveerles y solventarles los gastos médicos a los toreros actuantes dentro de la primeras 24 horas a partir del inicio del festejo, así que cuando termino el ‘tru-tru’ el recién zurcido se trepó en su patiteneta, pues no podía irse a pincel debido al pisotón infame y los madrazos  que le receto el bravucón  y se retacho  al hotel donde se había vestido, el caso es que como la ‘talacha’ en la ‘naylon’  solo fue de dos trayectorias que apenas apuntaban pa’ los 30 cm.,  aparte del puntazo que trae en la ingle, por eso yo pregunto desde mi burda ignorancia ¿que la cosa no era como pa’ pasar la noche en un lugar higiénico, como  un nosocomio? eso si como era lógico, el paciente requirió de pasarse por el cogote los medicamentos de rigor  y pues se esperaba que la empresa que se ahorraría la noche de hospital, cuando menos se cayera con el parné pa’ comprar las píldoras, pero ni maíz paloma, ¿como arriesgarse a la quiebra? así que un samaritano salió echo la mocha a la botica más cercana a comprar las medicinas  para lo cual  tuvo que desgarrarle la panza al cochinito  de los ahorros, siguiente melodrama en ‘La Rosa de Guadalupe’ por el canal  donde se trasmiten los casos patéticos, y que conste que  no juzgo solo me limito a expresar aquello de ‘Señor perdónalos, no saben lo que hacen’.  

               XXVI Jornadas Nacionales de Cirugía Taurina
Y siguiendo con el orden médico ahora voy con un acontecimiento de alta relevancia para la fiesta brava mundial que es digno de resaltarse y  en ello lleva el aplauso para quienes les dan vida como lo será la realización que próximamente se celebraran de las XXVI Jornadas Nacionales de Cirugía Taurina, enmarcadas dentro de la cultura denominada ‘La Tauromaquia de José Guadalupe Posada’ sí, aunque parezca una fantasía la Ciencia y el Arte van en Mano a Mano, ni más ni menos que en la mismísima capital de la torería en México que lo es el territorio hidrocálido, todo ello acartelado por ‘Los Cirujanos Taurinos Mexicanos de la Sociedad Internacional de Cirugía Taurina’ y el ‘Servicio Médico de las plazas de Toros Monumental y San Marcos de Aguascalientes’, lo que se celebrará los días 7, 8 y 9 de Noviembre de este 2013 bajo la batuta del Dr. Jorge Uribe Camacho en su calidad de Presidente Capítulo Mexicano de Cirugía Taurina  ( tel. 01 (55) 1251 4407 Asociación Nacional de Matadores, e-mail jcuribe66@yahoo.com),   quien estará apuntalado por el Dr. Carlos Hernández Sánchez en funciones de Presidente de las XXVI Jornadas (tel. 01 (449) 9155661 e-mail carloshdezsanchez@yahoo.com.mx) y  por el también Dr. Enrique E. González Careaga quien es vocal regional y al alimón ejercerá como tesorero  (tel. 01 (449) 9725002, e-mail enriqueeglz@hotmail.com) los actos culturales dentro del recuerdo luctuoso de los 100 Años del maestro Posada serán instalados en el Teatro Antonio Leal y Romero en donde sus grabados taurinos podrán ser admirados y como sede del evento tendrán el taurinísimo y tradicional Hotel Francia.
                                           El Diablo y algo más...
Y pa’ no alejarnos de casos médicos y culturales viene bien recomendar un libro que en sus letras nos lleva al drama ¿otro? de cómo se les daba o más bien no se le daba atención médica a las cornadas que sufren los toreros de la legua su titulo es ‘El Diablo y algo más… de la autoría del Dr. Rubén Marín, editado  por Jus en 1964, consígalo y váyase directamente  al capitulo ‘El Milagro’ y si usted es sensible al drama torero tenga a la mano un algodoncito con alcohol por si no aguanta el trance.

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