21 junio 2010
Arturo Macías 'prende' en España
Plaza de toros de Alicante. Quinto festejo de la Feria de Hogueras. Un cuarto de plaza. Toros de Valdefresno y Fraile Mazas (5º como sobrero tras devolver el segundo y correr turno el matador), muy en el tipo de su encaste en cuanto a presentación, bajos y bien hechos. Nobles, aunque con un punto de mansedumbre y mucha calidad en los engaños. El quinto, que salió más desentendido de las suertes y el sexto, más deslucido, dieron menos opciones.
MUNDOTORO | 21/06/2010
Arturo Macías ha cortado la única oreja del quinto festejo de la Feria de Hogueras celebrado esta tarde en Alicante, un espectáculo en el que se lidió una corrida de Valdefresno con gran calidad para los toreros. Del conjunto, destacaron especialmente los cuatro primeros. Macías fue el único en sacar tajada tras firmar la faena de mayores argumentos de una tarde en la que tanto El Cid como Matías Tejela, aún habiendo podido cortar una oreja de no haber fallado a espadas, no terminaron de redondear con sus respectivos lotes.
El torero mexicano posiblemente realizó la mejor de las faenas de su campaña europea. Cortó la oreja tras una labor en la que tiró con pulso de la enclasada embestida del Valdefresno. Macías aprovechó la notable condición de su ejemplar en una labor que estuvo aderezada con detalles y suertes del toreo mexicano. Llevó al toro muy cosido al trapo dejándole la muleta siempre puesta y llegó al público que, tras una estocada en buen sitio, le pidió una oreja que fue concedida. Con su segundo, no consiguió estructurar una labor que llegara al tendido.
El Cid, por su parte, podía haber obtenido mayor reconocimiento en sus dos faenas si hubiera estado más certero en el manejo de la espada. Saludó una ovación de su primero, un toro noble que embistió con recorrido hasta que se rajó. El sevillano destacó sobre todo en el inicio de faena con la mano zurda donde hubo dos series de muletazos largos. Tras un pinchazo y una estocada hubo petición de oreja que posiblemente hubiera sido más nutrida de haber acertado en su primera entrada a matar. Estuvo a gusto con el cuarto, un toro claro que embistió con franqueza y duró en la muleta. En esta ocasión, realizó una faena larga que podía haber alcanzado mayor rédito de no errar con el estoque.
Matías Tejela corrió turno después de que su primer animal se partiera un pitón de salida y el Presidente decidiera devolverlo. Lidió un toro que embistió con dulzura y al ralentí aunque evidenció un punto de mansedumbre. El madrileño rápido le cogió el aire en una labor que comenzó de rodillas en el tercio. Se acopló a él de manera progresiva y hubo dos últimas series-una por cada pitón- que fueron lo más relevante de su trasteo. Después de unas bernadinas muy ceñidas, pinchó dos veces y perdió una oreja.
El quinto fue un sobrero de Fraile Mazas, más alto y estrecho de sienes que sus hermanos que pecó de salir desentendido del engaño. El madrileño acertó al taparle la huída hilvanando dos series sobre con la derecha que tuvieron calado en el tendido.
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