28 mayo 2009

RINCON TAURINO (28/V/09)


"La muerte de Manuel Capetillo III"



(Conclusión)

Antonio Casanueva


Habremos de terminar esta serie de artículos en homenaje a quien fuera llamado "El mejor muletero del Mundo" Manuel Capetillo fallecido recientemente a la edad de 83 años. Gran figura del toreo, que para quien esto escribe, ha provocado mayor admiración que ningún otro torero. En ocasiones se me ha cuestionado en quien o a quien pudo haber continuado tan gran admiración sentida tanto por la persona de Capetillo como por su toreo, a lo que reflexionando sobre lo que sería una utópica respuesta tal vez podría haber sido J. Rubén Arroyo, siempre y cuando los toros le hubieran respetado y partiendo de ello, se hubiera consolidado como la gran figura que llevaba adentro. Estando sin embargo, la palabra hubiera, resulta fácil caer en la cuenta que -hubiera sido- equivale simplemente a un deseo personal o mera suposición.

Volviendo a Manuel Capetillo y su historia hemos de comentar que allá por el año

De 1956, vino a México para actuar en la primera Feria Guadalupana, en la hoy derruida Plaza de “El Toreo” de Cuatro Caminos, el español Antonio Ordóñez, quien por esos años fuera considerado como el Mejor Muletero Español. Cabe aclarar que Ordóñez, al torear en la referida de El Toreo, hizo honor a su mote, realizando una bellísima faena en esa plaza, la tarde del 9 de diciembre alternando con Joselito Huerta y Miguel Baez "Litri" al toro Casacabel de San Mateo cortándole las orejas y el rabo, enloqueciendo al público que llenaba el hoy desaparecido coso .


Basándose en esa pre
misa, el conocido periodista “Ojo”, director del semanario especializado El Redondel y luego de alguna de las grandes faenas de Manuel, no dudó en bautizarle como "El Mejor muletero del mundo", dado que según don Alfonso de Icaza, que tal era el nombre de "Ojo", Capetillo superaba y con mucho a Ordóñez, incluso en su faena al pupilo de San Mateo a que nos hemos referido, indicando que el toreo de Manuel tenía mas hondura, mas verdad y por supuesto mucho mayor dimensión que el realizado en aquella tarde por el artista español.

No dudando -por supuesto- el apasionamiento de aquel crítico, quien sin duda lo era, y quien fue mas conocido precisamente por los istmos de sus fulgurantes crónicas, sino que en general, el toreo de nuestro personaje era mas templado, mas largo y por tanto, mucho mas poderoso.


En la carrera de Manuel se repitieron las grandes faenas, de la mayoría de las
cuales ya hemos hablado en los capítulos previos de este trabajo y solo nos faltaría agregar aquellas de Chulín y Sireno de Torrecilla, Parroquiano de Zacatepec, Heraldo de Tequisquiapan o Cordobés y Flor de mayo de don Reyes Huerta, entre las mas destacadas.


Especialmente aquella del 3 de febrero de 1957, en lo que sería el onceavo aniversario de la inauguración de la Plaza México, fecha que por prematura -La plaza era todavía muy joven- no se anunciara como tal. Alternó en esa tarde con Capetillo, Miguel Baez "Litri", en la que pudo considerarse como su mejor actuación en México así como Jorge "El Ranchero" Aguilar, matando una corrida de toros de Piedras Negras, en la que tarde Capetillo realizó una gran faena al toro Recluta , para muchos, su mejor feaena, aunado al hecho de que esa tarde ambos, Capetillo y "Litri" estuvieron grandiosos en La México.


No obstante esa y otras opiniones al respecto, la gran faena de su vida, Manuel se la realizó al toro Tabachín de
Valpariso el 17 de febrero de 1963, en la Monumental plaza México, alternando nada menos con el llamado "Niño sabio de Camas" Paco Camino, durante la tarde de alternativa de Víctor Huerta, hermano de Joselito el de Tetela. En aquella inolvidable tarde, Manuel pinchó en dos ocasiones por lo que la autoridad -ante la insistencia del respetable- tan solo le concedió una oreja, a lo que el público para compensarlo por tal desagravio, le hizo dar seis vueltas al ruedo, en un homenaje sin precedente, que se prolongó por mas de media hora.



Durante la temporada de 1968, nuestro personaje tan apasionado como polifacético como era, luego de ciertas difi
cultades con el llamado "Gallego" Ángel Vázquez quien por esos años estaba convertido en todopoderoso y autoritario empresario de la plaza capitalina, decidió retirarse de los toros, despidiéndose en la plaza México el 25 de febrero de 1968, en una encerrona con toros de Valparaiso, siendo Pelón el toro de la despedida. Posteriormente, concluyo carrera en Guadalajara, por aquel entonces en la llamada "Plaza Monumental de Jalisco" el 10 de marzo la cual había estado anunciada para el domingo anterior, pero se tuvo que retrazar por razones tanto atmosféricas como logísticas y de la que presentamos el programa de seda correspondiente a esa inolvidable fecha.



Dos años mas tarde Capetillo volvió a los ruedos, por lo que nosotros como la también recientemente desaparecida Conchita Cintrón podríamos preguntarnos ¿Porque vuelven los toreros? . Capetillo por su parte, lo hizo pretextando que deseaba estar cerca a las carreras de sus hijos Manuel y Guillermo, a quienes alternativó y llegó a torear con ellos en varias ocasiones destacando una sensacional tarde celebrada el la plaza Fermín Rivera - El Paseo de San Luís Potosí, en que alternando los tres, triunfaron ampliamente y si la memoria no me engaña, saliendo los tres a hombros de la plaza .

Fin.


Antonio Casanueva



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